Löydetty 2376 Tulokset: dijo

  • Lamec dijo a sus mujeres: "Ada y Sila, escuchadme; mujeres de Lamec, prestad oído a mis palabras: Por una herida maté a un hombre, y a un joven por una contusión. (Génesis 4, 23)

  • Adán tuvo de nuevo relaciones con su mujer, y ésta dio a luz un hijo, a quien puso por nombre Set, "porque Dios, dijo, me ha dado otro descendiente en lugar de Abel, al que mató Caín". (Génesis 4, 25)

  • El Señor dijo: "Mi espíritu no permanecerá por siempre en el hombre, porque es de carne. Sus días serán ciento veinte años". (Génesis 6, 3)

  • dijo: "Exterminaré de la superficie de la tierra al hombre que he creado, hombres y animales, reptiles y aves del cielo, todo lo exterminaré, pues me pesa haberlos hecho". (Génesis 6, 7)

  • Dios dijo a Noé: "He decidido acabar con todo ser viviente, porque la tierra está llena de violencia por culpa de los hombres. Voy a exterminarlos a todos ellos juntamente con la tierra. (Génesis 6, 13)

  • El Señor dijo a Noé: "Entra en el arca tú con toda tu familia, porque tú eres el único hombre justo que he encontrado en esta generación. (Génesis 7, 1)

  • Dios habló a Noé y le dijo: (Génesis 8, 15)

  • El Señor aspiró el perfume agradable, y se dijo: "No maldeciré más la tierra por causa del hombre, porque los impulsos del corazón del hombre tienden al mal desde su adolescencia; jamás volveré a castigar a los seres vivientes como acabo de hacerlo. (Génesis 8, 21)

  • Dios bendijo a Noé y a sus hijos, y les dijo: "Sed fecundos, multiplicaos y llenad la tierra. (Génesis 9, 1)

  • Dios dijo a Noé y a sus hijos: (Génesis 9, 8)

  • Dios dijo a Noé: "Tal es la señal del pacto que acabo de establecer entre mí y todos los seres vivientes de la tierra". (Génesis 9, 17)

  • y dijo: "¡Maldito sea Canaán! Sea el último de los esclavos de sus hermanos". (Génesis 9, 25)


“O Senhor sempre orienta e chama; mas não se quer segui-lo e responder-lhe, pois só se vê os próprios interesses. Às vezes, pelo fato de se ouvir sempre a Sua voz, ninguém mais se apercebe dela; mas o Senhor ilumina e chama. São os homens que se colocam na posição de não conseguir mais escutar.” São Padre Pio de Pietrelcina