Löydetty 713 Tulokset: corazón endurecido

  • En cuanto a ti, si andas en mi presencia, como anduvo tu padre David, con pureza y rectitud de corazón; si cumples todo lo que yo te mande y si guardas mis leyes y mandamientos, (I Reyes 9, 4)

  • esto es, de las naciones de quienes había dicho el Señor a los israelitas: "No os unáis con ellas en matrimonio, pues inclinarán vuestro corazón hacia sus dioses". Pero Salomón se enamoró de ellas, (I Reyes 11, 2)

  • y tuvo setecientas mujeres reinas y trescientas concubinas que pervirtieron su corazón. (I Reyes 11, 3)

  • En su ancianidad ellas le desviaron el corazón hacia dioses extranjeros, de modo que su corazón no fue enteramente del Señor como lo fue el corazón de su padre David. (I Reyes 11, 4)

  • El Señor se irritó contra Salomón por haber desviado su corazón del Señor, Dios de Israel, que se le había aparecido dos veces (I Reyes 11, 9)

  • Si este pueblo sube a ofrecer sacrificios en el templo del Señor, en Jerusalén, el corazón de esta gente se volverá a su señor, a Roboán, rey de Judá, y me matarán a mí, para tornar a Roboán, rey de Judá". (I Reyes 12, 27)

  • quité el reino a la casa de David para dártelo a ti; pero tú no has sido como mi siervo David, el cual observó mis preceptos y me siguió de todo corazón, haciendo sólo lo que es recto a mis ojos, (I Reyes 14, 8)

  • Cometió todos los pecados que su padre antes de él había cometido, y su corazón no fue sumiso al Señor, como el corazón de su padre David. (I Reyes 15, 3)

  • Respóndeme, Señor; respóndeme, y que sepa este pueblo que tú eres, Señor, el verdadero Dios, y así se convertirá de corazón". (I Reyes 18, 37)

  • Pero Jehú había echado ya mano a su arco e hirió a Jorán por la espalda, de suerte que la saeta le salió por el corazón, y cayó desplomado en su carro. (II Reyes 9, 24)

  • Pero Jehú no se cuidó de seguir la ley del Señor, Dios de Israel, con todo su corazón, y no se apartó del pecado de Jeroboán, el que hizo pecar a Israel. (II Reyes 10, 31)

  • "¡Ay, Señor! Acuérdate de que me he conducido en tu servicio con fidelidad y de todo corazón, y he hecho lo que es justo a tus ojos". Y Ezequías rompió a llorar amargamente. (II Reyes 20, 3)


“Mantenha-se sempre muito unido à Igreja Católica, pois somente ela pode lhe dar a verdadeira paz, porque somente ela possui Jesus Sacramentado que é o verdadeiro príncipe da paz.” São Padre Pio de Pietrelcina