Löydetty 237 Tulokset: contigo

  • Como un joven se casa con su novia, así tu constructor se casará contigo; y como el esposo se recrea en la esposa, así tu Dios se recreará en ti. (Isaías 62, 5)

  • No tengas miedo de ellos, porque yo estoy contigo para protegerte, dice el Señor". (Jeremías 1, 8)

  • Lucharán contra ti, pero no podrán vencerte, porque yo estoy contigo para librarte, dice el Señor". (Jeremías 1, 19)

  • Muy justo eres tú, Señor, para que yo trate de litigar contigo. No obstante, quiero sólo exponerte un caso: ¿Por qué los malvados prosperan en sus caminos? ¿Por qué viven en paz los traidores? (Jeremías 12, 1)

  • A mí en cambio, Señor, me conoces, pruebas mi corazón y ves que está contigo. Sepáralos como ovejas para el matadero, guárdalos para el día de la matanza. (Jeremías 12, 3)

  • Yo te constituiré para este pueblo, cual muralla de bronce inconmovible. Lucharán contra ti, mas no te vencerán, pues yo estaré contigo para salvarte y librarte -dice el Señor-. (Jeremías 15, 20)

  • El Señor me dijo: "Vete a comprar una vasija de barro, toma contigo algunos de los ancianos del pueblo y de los sacerdotes (Jeremías 19, 1)

  • Y quedarán como tipo de maldición entre todos los desterrados de Judá que están en Babilonia, los cuales dirán: El Señor haga contigo como con Sedecías y con Ajab, a quienes el rey de Babilonia tostó al fuego. (Jeremías 29, 22)

  • Porque yo estoy contigo -dice el Señor- para salvarte. Aniquilaré a todas las naciones entre las que te he dispersado. A ti no te aniquilaré; sólo te castigaré como mereces y no te dejaré pasar nada. (Jeremías 30, 11)

  • Entonces el rey dio a Ebedmélec, el etíope, esta orden: "Toma de aquí contigo tres hombres y saca a Jeremías de la cisterna antes de que muera". (Jeremías 38, 10)

  • Mira, todas las mujeres que han quedado en el palacio del rey de Judá serán llevadas a los generales del rey de Babilonia, y serán ellas las que exclamarán: ¡Te han engañado, han podido contigo tus buenos amigos! ¡Tus pies han hundido en el fango y ellos te han dado la espalda! (Jeremías 38, 22)

  • Si los dignatarios llegan a saber que yo he hablado contigo y se presentan a ti para decirte: Queremos saber qué has dicho al rey y qué es lo que el rey te ha respondido; no nos ocultes nada, de lo contrario te mataremos, (Jeremías 38, 25)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina