Löydetty 386 Tulokset: Sangre

  • Sus hijos le presentaron la sangre, y él, mojando su dedo, untó con ella los cuernos del altar, derramando la restante al pie del mismo. (Levítico 9, 9)

  • Aarón inmoló a continuación el holocausto, sus hijos le presentaron la sangre y él la derramó en torno del altar. (Levítico 9, 12)

  • Finalmente, inmoló el toro y el carnero ofrecidos por el pueblo en sacrificio de reconciliación; sus hijos le presentaron la sangre, y él la derramó en torno del altar. (Levítico 9, 18)

  • Puesto que su sangre no fue introducida dentro del santuario, debíais haber comido la carne en ese lugar santo, como yo había ordenado". (Levítico 10, 18)

  • pero la madre continuará retirada durante treinta y tres días más purificando su sangre; no tocará nada consagrado, ni irá al santuario hasta que se haya cumplido el tiempo de su purificación. (Levítico 12, 4)

  • Si da a luz una hembra, será impura durante dos semanas, como en su menstruación, y permanecerá retirada sesenta y seis días más purificando la sangre. (Levítico 12, 5)

  • El sacerdote los ofrecerá ante el Señor, hará sobre ella el rito de absolución y quedará purificada de su flujo de sangre. Ésta es la ley para la mujer que da a luz un niño o una niña. (Levítico 12, 7)

  • Tomará luego el ave viva, el cedro, la cinta de lana escarlata y el hisopo (incluida el ave viva) y los mojará en la sangre del ave degollada sobre el agua corriente. (Levítico 14, 6)

  • El sacerdote tomará de la sangre del sacrificio de reparación y ungirá con ella el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, el pulgar de su mano derecha y el dedo gordo de su pie derecho. (Levítico 14, 14)

  • Con aceite del que le queda en la palma de la mano ungirá el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, el pulgar de su mano derecha y el dedo gordo de su pie derecho, encima de la sangre de la víctima de reparación. (Levítico 14, 17)

  • Inmolará el cordero del sacrificio de reparación, tomará un poco de sangre y ungirá con ella el lóbulo de la oreja derecha, el pulgar de la mano derecha y el dedo gordo del pie derecho del que se está purificando. (Levítico 14, 25)

  • Con aceite del que le queda en la palma de la mano izquierda le untará el lóbulo de la oreja derecha, el pulgar de la mano derecha y el dedo gordo del pie derecho en el mismo lugar en que puso la sangre del sacrificio de reparación. (Levítico 14, 28)


“Todas as graças que pedimos no nome de Jesus são concedidas pelo Pai eterno.” São Padre Pio de Pietrelcina