Löydetty 26 Tulokset: Sabiendo
Después dijo a los guardias que estaban junto a él: "Matad a los sacerdotes del Señor, porque también ellos han prestado ayuda a David; pues sabiendo que había huido, no me avisaron". Pero la guardia del rey no quiso poner su mano sobre los sacerdotes del Señor. (I Samuel 22, 17)
El rey se levantó, de noche como era, y dijo a sus oficiales: "Yo os aclararé lo que han tramado contra nosotros los sirios. Sabiendo que nosotros estamos hambrientos, han salido del campamento para esconderse en el campo, diciendo: Sin duda saldrán de la ciudad, y entonces los coparemos vivos y entraremos en la ciudad". (II Reyes 7, 12)
para que sus súbditos no se turbaran si sucedía algún hecho imprevisto o llegaba alguna noticia desagradable, sabiendo todos en manos de quién quedaba el poder; (II Macabeos 9, 24)
Harás bien si envías embajadores para estipular la paz, a fin de que, sabiendo nuestra voluntad real, estén contentos y puedan dedicarse con alegría a sus propios intereses". (II Macabeos 11, 26)
Resolví, por tanto, hacer de ella la compañera de mi vida, sabiendo que sería mi consejera para el bien y mi consuelo en las tristezas y las penalidades. (Sabiduría 8, 9)
Sabiendo que no la conseguiría si Dios no me la daba y esto mismo era ya un acto de buen juicio: saber de quién venía este don , acudí al Señor y le supliqué, diciendo con toda mi alma: (Sabiduría 8, 21)
Aun cuando pecamos somos tuyos, reconocemos tu poder; pero no queremos pecar sabiendo que te pertenecemos. (Sabiduría 15, 2)
Aquella noche les fue de antemano anunciada a nuestros padres para que, sabiendo con certeza a qué juramento se habían confiado, tuvieran buen ánimo; (Sabiduría 18, 6)
Sabiendo, pues, que no son dioses, no los temáis. (Baruc 6, 64)
Jesús lo vio echado y, sabiendo que llevaba mucho tiempo, le dijo: "¿Quieres curarte?". (Juan 5, 6)
Antes de la fiesta de la pascua, sabiendo que le había llegado la hora de pasar de este mundo al Padre, Jesús, que había amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el fin. (Juan 13, 1)
Jesús, sabiendo que el Padre había puesto en sus manos todas las cosas, que había salido de Dios y que a Dios volvía, (Juan 13, 3)