Löydetty 1384 Tulokset: Pie
tenía un campo, lo vendió, trajo el dinero y lo puso a los pies de los apóstoles. (Hechos 4, 37)
Un tal Ananías, de acuerdo con Safira, su mujer, vendió una propiedad (Hechos 5, 1)
y se quedó con parte del precio, sabiéndolo su mujer; llevó el resto y lo puso a los pies de los apóstoles. (Hechos 5, 2)
Ananías, al oír estas palabras, cayó muerto. Y cuantos lo supieron se llenaron de miedo. (Hechos 5, 5)
Pedro replicó: "¿Por qué os pusisteis de acuerdo para tentar al Espíritu del Señor? Ahí tienes a la puerta los pies de los que acaban de enterrar a tu marido; ellos te llevarán a ti también". (Hechos 5, 9)
Cayó fulminantemente a los pies de él y expiró. Los jóvenes entraron, la encontraron muerta y la llevaron a enterrar junto a su marido. (Hechos 5, 10)
y no le dio propiedad en esta región, ni siquiera un pie de tierra; pero prometió dársela en posesión a él y a su descendencia después de él, aunque no tenía hijos. (Hechos 7, 5)
El cielo es mi trono, y la tierra, el estrado de mis pies; ¿qué casa podríais construirme y qué lugar para reposo mío? (Hechos 7, 49)
Pero él, lleno del Espíritu Santo, con los ojos fijos en el cielo, vio la gloria de Dios y a Jesús de pie a la derecha de Dios, (Hechos 7, 55)
y dijo: "Veo los cielos abiertos y al hijo del hombre de pie a la derecha de Dios". (Hechos 7, 56)
lo llevaron fuera de la ciudad y se pusieron a apedrearlo. Los testigos habían dejado sus vestidos a los pies de un joven llamado Saulo. (Hechos 7, 58)
Arrepiéntete de tu maldad y pide al Señor que te perdone, si es posible, el mal pensamiento que has tenido; (Hechos 8, 22)