Löydetty 983 Tulokset: Moisés y faraón

  • Dijo el Faraón a José: "Yo soy el Faraón, pero sin tu permiso nadie levantará la mano ni el dedo meñique en todo Egipto". (Génesis 41, 44)

  • El Faraón impuso a José el nombre de Zafnat Panéaj y le dio por mujer a Asenat, hija de Putifar, sacerdote de On. José recorrió todo Egipto. (Génesis 41, 45)

  • Tenía José treinta años cuando se presentó ante el Faraón, rey de Egipto. Salió de su presencia y recorrió toda la tierra de Egipto. (Génesis 41, 46)

  • Cuando se sintió el hambre en Egipto, el pueblo clamó al Faraón pidiendo pan. Y el Faraón dijo a todos los egipcios: "Id a José y haced lo que él os diga". (Génesis 41, 55)

  • Os voy a someter a esta prueba. ¡Vive el Faraón, que no saldréis de aquí hasta que venga vuestro hermano menor! (Génesis 42, 15)

  • Enviad uno de vosotros a buscar a vuestro hermano y los demás quedad prisioneros. Así se comprobarán vuestras palabras, y se verá si decís o no verdad. Si no, ¡vive el Faraón, que sois espías!". (Génesis 42, 16)

  • Judá se acercó a él y le dijo: "Perdón, señor. Permite a tu siervo dirigir una palabra a mi señor, sin que por eso se irrite contra él, porque tú eres en verdad como el Faraón. (Génesis 44, 18)

  • Entonces rompió a llorar a voz en grito, de modo que lo oyeron los egipcios, y la noticia llegó a casa del Faraón. (Génesis 45, 2)

  • No fuisteis vosotros los que me enviasteis aquí, sino Dios. Él me ha hecho padre del Faraón y señor de toda su casa, gobernador de todo el país de Egipto. (Génesis 45, 8)

  • Llegó a casa del Faraón la noticia de que habían venido los hermanos de José, y el Faraón y sus servidores se alegraron. (Génesis 45, 16)

  • El Faraón dijo a José: "Di a tus hermanos: Haced lo siguiente: cargad vuestros asnos y volved a la tierra de Canaán. (Génesis 45, 17)

  • Así lo hicieron los hijos de Israel. José les proporcionó carros conforme a la orden del Faraón y les proveyó de víveres para el camino. (Génesis 45, 21)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.” São Padre Pio de Pietrelcina