Löydetty 1455 Tulokset: Moisés y faraón de Egipto

  • Jacob fue a Egipto, donde él y nuestros padres murieron. (Hechos 7, 15)

  • A medida que se acercaba el tiempo en que se debía cumplir la promesa que Dios había hecho a Abrahán, el pueblo aumentaba y se multiplicaba en Egipto, (Hechos 7, 17)

  • En este momento nació Moisés, que fue grato a Dios. Criado durante tres meses en casa de su padre, (Hechos 7, 20)

  • fue abandonado, y la hija del Faraón lo recogió y lo crió como hijo propio. (Hechos 7, 21)

  • Moisés fue instruido en todo el saber de los egipcios, y era poderoso en palabras y obras. (Hechos 7, 22)

  • Al oír esto, Moisés huyó y se fue a vivir como extranjero a la tierra de Madián, donde tuvo dos hijos. (Hechos 7, 29)

  • Moisés se sorprendió de lo que veía; al acercarse para verlo mejor, se oyó la voz del Señor: (Hechos 7, 31)

  • Yo soy el Dios de tus padres, el Dios de Abrahán, de Isaac y de Jacob. Moisés, tembloroso, no se atrevió a mirar. (Hechos 7, 32)

  • He visto bien la esclavitud de mi pueblo en Egipto; he oído sus gemidos y he bajado a librarlos. Y ahora ven, que te voy a enviar a Egipto. (Hechos 7, 34)

  • A este Moisés a quien habían rechazado diciendo: ¿Quién te ha puesto por jefe y juez?, a ése Dios lo envió como jefe y libertador por mediación del ángel que se le apareció en la zarza. (Hechos 7, 35)

  • Él fue quien los sacó, obrando prodigios y milagros en Egipto, en el mar Rojo y en el desierto durante cuarenta años. (Hechos 7, 36)

  • al que no quisieron obedecer nuestros padres, sino que lo rechazaron, y, con el corazón puesto en Egipto, (Hechos 7, 39)


“Quando te encontrares diante de Deus, na oração considera-te banhado na luz da verdade, fala-lhe se puderes, deixa simplesmente que te veja e não tenhas preocupação alguma”. São Padre Pio de Pietrelcina