Löydetty 61 Tulokset: Luna
No se pondrá jamás tu sol, ni menguará tu luna, porque el Señor será tu luz eterna, cumplidos ya los días de tu duelo. (Isaías 60, 20)
Cada luna nueva y cada sábado vendrá todo el mundo a prosternarse ante mí -dice el Señor-. (Isaías 66, 23)
Serán esparcidos al sol, a la luna y a todos los astros del cielo, a quienes amaron, sirvieron y siguieron, y a los que consultaron y adoraron. No serán recogidos ni enterrados, sino que quedarán sobre la tierra como estiércol. (Jeremías 8, 2)
Esto dice el Señor, el que establece el sol para alumbrar el día, la luna y las estrellas para alumbrar la noche, el que agita el mar y hace bramar sus olas, cuyo nombre es "el Señor todopoderoso". (Jeremías 31, 35)
El sol, la luna y las estrellas, que brillan y cumplen su cometido, son obedientes; (Baruc 6, 59)
no hacen ver a las gentes señales en el cielo, ni resplandecen como el sol, ni alumbran como la luna. (Baruc 6, 66)
Cuando te extingas, cubriré los cielos, oscureceré las estrellas, cubriré el sol de nubes y la luna no dará ya su luz. (Ezequiel 32, 7)
Esto dice el Señor Dios: La puerta del atrio interior, que mira a oriente, permanecerá cerrada en los días laborables, pero el sábado se abrirá, así como el día de la luna nueva. (Ezequiel 46, 1)
Los laicos se postrarán ante el Señor a la entrada de esta puerta los sábados y los días de luna nueva. (Ezequiel 46, 3)
En el día de luna nueva: un novillo sin defecto, seis corderos y un carnero sin defecto. (Ezequiel 46, 6)
Sol y luna, bendecid al Señor, alabadlo y ensalzadlo eternamente. (Daniel 3, 62)
Ante ellos tiembla la tierra, se estremecen los cielos; el sol y la luna se oscurecen y las estrellas pierden su brillo. (Joel 2, 10)