Löydetty 371 Tulokset: Junto

  • la llevarán junto a un arroyo que siempre lleve agua, un lugar que nunca haya sido labrado ni sembrado, y allí la degollarán. (Deuteronomio 21, 4)

  • Reunid junto a mí a todos los ancianos y jefes de vuestras tribus para que yo les recite estas palabras y ponga al cielo y a la tierra contra ellos. (Deuteronomio 31, 28)

  • cuando entremos en la ciudad, atarás a la ventana por la que nos vamos a descolgar esta cinta de color escarlata, y reunirás junto a ti, en casa, a tu padre, a tu madre, a tus hermanos y a toda tu familia. (Josué 2, 18)

  • Todo el pueblo volvió sano y salvo junto a Josué, en Maqueda. Nadie se atrevió a hacer nada contra los israelitas. (Josué 10, 21)

  • Todos estos reyes se pusieron de acuerdo, y acamparon junto a las aguas de Merón para luchar contra Israel. (Josué 11, 5)

  • Pero los hijos de Judá no pudieron echar de Jerusalén a los jebuseos; por eso los jebuseos viven todavía hoy en Jerusalén junto con los hijos de Judá. (Josué 15, 63)

  • Pero no pudieron echar de Guézer a los cananeos que vivían allí, y los cananeos viven todavía allí junto con Efraín, pero sometidos a tributo. (Josué 16, 10)

  • Cuando llegaron a las regiones del Jordán, todavía en tierra cananea, levantaron allí un altar junto al Jordán, un altar de gran apariencia. (Josué 22, 10)

  • Llegó a oídos de los israelitas que los rubenitas, los gaditas y la media tribu de Manasés habían levantado un altar en la frontera de Canaán, junto al Jordán, en territorio israelita; (Josué 22, 11)

  • Galaad se quedó al otro lado del Jordán; y Dan, ¿por qué se quedó junto a las naves? Aser se sentó a orillas del mar, y habita tranquilo en sus puertos. (Jueces 5, 17)

  • Vinieron los reyes, lucharon; entonces los reyes de Canaán combatieron en Tanac, junto a las aguas de Meguido, pero no obtuvieron un botín de plata. (Jueces 5, 19)

  • Al día siguiente, cuando se levantó la gente de la ciudad, vieron que el altar de Baal había sido destruido, el cipo que estaba junto a él cortado, y el toro gordo había sido ofrecido en holocausto sobre el nuevo altar. (Jueces 6, 28)


“Sigamos o caminho que nos conduz a Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina