Löydetty 1981 Tulokset: Descanso de la tierra

  • En efecto, la tierra que absorbe el agua caída repetidas veces sobre ella y que produce frutos abundantes para aquellos que la cultivan, recibe la bendición de Dios; (Hebreos 6, 7)

  • pero la que produce espinas y abrojos es tierra baldía, será tierra maldita que terminará siendo pasto de las llamas. (Hebreos 6, 8)

  • Por tanto, si estuviese sobre la tierra no sería sacerdote en modo alguno, porque ya hay encargados de ofrecer los dones según la ley. (Hebreos 8, 4)

  • Por la fe vino a habitar en la tierra prometida como en un país extranjero, viviendo en tiendas de campaña, con Isaac y Jacob, herederos con él de la misma promesa. (Hebreos 11, 9)

  • Todos éstos murieron en la fe sin haber obtenido la realización de las promesas, pero habiéndolas visto y saludado de lejos y reconociendo que eran extranjeros y peregrinos en la tierra. (Hebreos 11, 13)

  • Por la fe pasaron el mar Rojo como por tierra seca; e intentando hacer lo mismo los egipcios, fueron sumergidos en las olas. (Hebreos 11, 29)

  • de quienes no era digno el mundo, errantes por los desiertos, las montañas, las cavernas y cuevas de la tierra. (Hebreos 11, 38)

  • Cuidado con no escuchar al que os habla; pues si aquéllos, por no escuchar al que promulgaba oráculos en la tierra no escaparon al castigo, ¡con cuánta mayor razón no escaparemos nosotros si volvemos la espalda a aquel que habla desde el cielo! (Hebreos 12, 25)

  • Aquel cuya voz conmovió entonces la tierra nos ha hecho ahora esta promesa: Una vez más conmoveré no sólo la tierra, sino también el cielo. (Hebreos 12, 26)

  • Habéis vivido sobre la tierra en delicias y placeres y habéis engordado para el día de la matanza. (Santiago 5, 5)

  • Tened paciencia, hermanos, hasta la venida del Señor. Ved cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando pacientemente hasta que caigan las lluvias tempranas y las tardías. (Santiago 5, 7)

  • Hermanos míos, ante todo no juréis ni por el cielo ni por la tierra, ni con cualquier otro juramento, sino que vuestro "sí" sea "sí" y vuestro "no", "no", para no incurrir en condenación. (Santiago 5, 12)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.” São Padre Pio de Pietrelcina