Löydetty 407 Tulokset: sangre

  • Carne de héroes comeréis, sangre de príncipes de la tierra beberéis. Todos son carneros, corderos, machos cabríos, pingües toros de Basán. (Ezequiel 39, 18)

  • Comeréis grasa hasta la saciedad y beberéis sangre hasta la embriaguez, en este sacrificio que yo os brindo. (Ezequiel 39, 19)

  • Y me dijo: Hijo de hombre, así dice el Señor Yahveh: Estas son las disposiciones del altar el día en que sea erigido para ofrecer en él el holocausto y derramar la sangre. (Ezequiel 43, 18)

  • Tomarás su sangre, y rociarás los cuatro cuernos, los cuatro ángulos del zócalo y el reborde todo alrededor. Así quitarás el pecado y harás expiación por él. (Ezequiel 43, 20)

  • que habéis cometido introduciendo extranjeros incircuncisos de corazón y de cuerpo para que estuvieran en mi santuario y profanaran mi Casa, cuando me ofrecíais mi alimento, grasa y sangre; así habéis roto mi alianza con todas vuestras abominaciones. (Ezequiel 44, 7)

  • Pero los sacerdotes levitas, hijos de Sadoq, que cumplieron mi ministerio en el santuario cuando los israelitas se descarriaban lejos de mí, ellos sí se acercarán a mí para servirme, y estarán en mi presencia para ofrecerme la grasa y la sangre, oráculo del Señor Yahveh. (Ezequiel 44, 15)

  • El sacerdote tomará la sangre de la víctima por el pecado y la pondrá en las jambas del pórtico de la Casa, en los cuatro ángulos del zócalo del altar, y en las jambas de los pórticos del atrio interior. (Ezequiel 45, 19)

  • que se puso a gritar: «¡Yo estoy limpio de la sangre de esta mujer!» (Daniel 13, 46)

  • y, para cumplir la ley de Moisés, les aplicaron la misma pena que ellos habían querido infligir a su prójimo: les dieron muerte, y aquel día se salvó una sangre inocente. (Daniel 13, 62)

  • Yahveh le dijo: «Ponle el nombre de Yizreel, porque dentro de poco visitaré yo la casa de Jehú por la sangre derramada en Yizreel, y pondré fin al reinado de la casa de Israel. (Oseas 1, 4)

  • sino perjurio y mentira, asesinato y robo, adulterio y violencia, sangre que sucede a sangre. (Oseas 4, 2)

  • Galaad es ciudad de malhechores, llena de huellas de sangre. (Oseas 6, 8)


“Nunca vá se deitar sem antes examinar a sua consciência sobre o dia que passou. Enderece todos os seus pensamentos a Deus, consagre-lhe todo o seu ser e também todos os seus irmãos. Ofereça à glória de Deus o repouso que você vai iniciar e não esqueça do seu Anjo da Guarda que está sempre com você.” São Padre Pio de Pietrelcina