Löydetty 254 Tulokset: salió

  • Luego vagamos fuera del camino de la verdad; la luz de la justicia no nos alumbró, no salió el sol para nosotros. (Sabiduría 5, 6)

  • que pronto un hombre irreprochable salió en su defensa. Con las armas de su propio ministerio, la oración y el incienso expiatorio, se enfrentó a la ira y dio fin a la plaga, mostrando con ello que era en verdad siervo tuyo. (Sabiduría 18, 21)

  • Aquella misma noche salió el Angel de Yahveh e hirió en el campamento asirio a ciento ochenta y cinco mil hombres; a la hora de despertarse, por la mañana, no había más que cadáveres. (Isaías 37, 36)

  • Se ha levantado el león de su cubil, y el devorador de naciones se ha puesto en marcha: salió de su lugar para dejar la tierra desolada. Tus ciudades quedarán arrasadas, sin habitantes. (Jeremías 4, 7)

  • Pues así dice Yahveh respecto a Sallum, hijo de Josías, rey de Judá y sucesor de su padre Josías en el reino, el cual salió de este lugar: «No volverá más aquí, (Jeremías 22, 11)

  • Salió Ebed Mélek de la casa del rey, y habló al rey en estos términos: (Jeremías 38, 8)

  • Salió Ismael, hijo de Netanías, a su encuentro desde Mispá. Iba llorando mientras caminaba, y llegando junto a ellos, les dijo: «Venid adonde Godolías, hijo de Ajicam.» (Jeremías 41, 6)

  • A la sombra de Jesbón se pararon sin fuerza los fugitivos, cuando fuego salió de Jesbón y llama de la casa de Sijón, y devoró las sienes de Moab y el cráneo de los hijos del ruido. (Jeremías 48, 45)

  • el querubín alargó su mano de entre los querubines hacia el fuego que había en medio de los querubines, lo tomó y lo puso en las manos del hombre vestido de lino. Este lo tomó y salió. (Ezequiel 10, 7)

  • La gloria de Yahveh salió de sobre el umbral de la Casa y se posó sobre los querubines. (Ezequiel 10, 18)

  • El hombre salió hacia oriente con la cuerda que tenía en la mano, midió mil codos y me hizo atravesar el agua: me llegaba hasta los tobillos. (Ezequiel 47, 3)

  • De uno de ellos salió un cuerno, pequeño, que creció mucho en dirección del sur, del oriente y de la Tierra del Esplendor. (Daniel 8, 9)


“Ouço interiormente uma voz que constantemente me diz: Santifique-se e santifique!” São Padre Pio de Pietrelcina