Löydetty 293 Tulokset: sabiduría divina
Salmo. De Asaf. Dios se levanta en la asamblea divina, en medio de los dioses juzga: (Salmos 82, 1)
¡Enseñanos a contar nuestros días, para que entre la sabiduría en nuestro corazón! (Salmos 90, 12)
¡Cuán numerosas tus obras, Yahveh! Todas las has hecho con sabiduría, de tus criaturas está llena la tierra. (Salmos 104, 24)
Cordura y sabiduría enséñame, pues tengo fe en tus mandamientos. (Salmos 119, 66)
Se explicaba también cómo éste, dotado de sabiduría, ofreció el sacrificio de la dedicación y la terminación del Templo. (II Macabeos 2, 9)
«Si tienes algún enemigo conspirador contra el Estado, mándalo allá y te volverá molido a azotes, si es que salva su vida, porque te aseguro que rodea a aquel Lugar una fuerza divina. (II Macabeos 3, 38)
los cobardes y desconfiados de la justicia divina, comenzaron a escaparse y alejarse del lugar; (II Macabeos 8, 13)
para aprender sabiduría e instrucción, para entender los discursos profundos, (Proverbios 1, 2)
El temor de Yahveh es el principio de la ciencia; los necios desprecian la sabiduría y la instrucción. (Proverbios 1, 7)
La Sabiduría clama por las calles, por las plazas alza su voz, (Proverbios 1, 20)
prestando tu oído a la sabiduría, inclinando tu corazón a la prudencia; (Proverbios 2, 2)
Porque Yahveh es el que da la sabiduría, de su boca nacen la ciencia y la prudencia. (Proverbios 2, 6)
