Löydetty 138 Tulokset: rey del norte
Vi que el carnero acometía contra el oeste, el norte y el sur. Ninguna bestia podía resistirle, nada podía escapar a su poder. Hacía lo que le parecía y así se hizo grande. (Daniel 8, 4)
Algunos años después concertarán una alianza, y la hija del rey del Mediodía vendrá donde el rey del Norte para realizar el convenio. Pero no resistirá la fuerza de su brazo, ni subsistirá su descendencia: será entregada, ella y las personas de su séquito, así como su hijo y el que era su apoyo. En aquel tiempo, (Daniel 11, 6)
se alzará en su lugar un retoño de sus raíces, que vendrá contra el ejército, entrará en la fortaleza del rey del Norte, y los tratará como vencedor. (Daniel 11, 7)
Sus mismos dioses, sus estatuas y sus objetos preciosos de plata y oro serán el botín que se llevará a Egipto, y durante algunos años se mantendrá a distancia del rey del Norte. (Daniel 11, 8)
Entonces el rey del Mediodía, montando en cólera, saldrá a combatir contra el rey del Norte, que movilizará una gran multitud; pero esta multitud caerá en sus manos. (Daniel 11, 11)
El rey del Norte volverá a la carga después de movilizar una multitud más numerosa que la primera, y al cabo de algunos años irrumpirá con un gran ejército y abundante aparato. (Daniel 11, 13)
Vendrá el rey del Norte, levantará trincheras y tomará una ciudad fortificada. Los brazos del rey del Mediodía no resistirán; ni siquiera lo mejor del pueblo tendrá fuerzas para resistir. (Daniel 11, 15)
«Al tiempo del Fin, el rey del Mediodía se enfrentará a él; el rey del Norte irrumpirá contra aquél con carros, jinetes y numerosas naves. Entrará en sus tierras, las invadirá y atravesará. (Daniel 11, 40)
Pero noticias venidas del Oriente y del Norte le turbarán; saldrá entonces con gran furor, con ánimo de destruir y exterminar a muchos. (Daniel 11, 44)
Al que viene del Norte le alejaré de vosotros, y le echaré hacia una tierra de aridez y desolación: su vanguardia hacia el mar oriental, hacia el mar occidental su retaguardia. Y subirá su hedor, y subirá su fetidez». (¡Porque él hace grandezas!) (Joel 2, 20)
Entonces vagarán de mar a mar, de norte a levante andarán errantes en busca de la Palabra de Yahveh, pero no la encontrarán. (Amós 8, 12)
El extenderá su mano contra el norte, destruirá a Asur, y dejará a Nínive en desolación, árida como el desierto. (Sofonías 2, 13)