Löydetty 324 Tulokset: prueba de las aguas amargas

  • ya que queréis una prueba de que habla en mí Cristo, el cual no es débil para con vosotros, sino poderoso entre vosotros. (II Corintios 13, 3)

  • La prueba de que sois hijos es que Dios ha enviado a nuestros corazones el Espíritu de su Hijo que clama: ¡Abbá, Padre! (Gálatas 4, 6)

  • y, no obstante la prueba que suponía para vosotros mi cuerpo, no me mostrasteis desprecio ni repulsa, sino que me recibisteis como a un ángel de Dios: como a Cristo Jesús. (Gálatas 4, 14)

  • Primero se les someterá a prueba y después, si fuesen irreprensibles, serán diáconos. (I Timoteo 3, 10)

  • donde me provocaron vuestros padres y me pusieron a prueba, aun después de haber visto mis obras (Hebreos 3, 9)

  • La fe es garantía de lo que se espera; la prueba de las realidades que no se ven. (Hebreos 11, 1)

  • Por la fe, Abraham, sometido a la prueba, presentó a Isaac como ofrenda, y el que había recibido las promesas, ofrecía a su unigénito , (Hebreos 11, 17)

  • Por tanto, también nosotros, teniendo en torno nuestro tan gran nube de testigos, sacudamos todo lastre y el pecado que nos asedia, y corramos con fortaleza la prueba que se nos propone, (Hebreos 12, 1)

  • ¡Feliz el hombre que soporta la prueba! Superada la prueba, recibirá la corona de la vida que ha prometido el Señor a los que le aman. (Santiago 1, 12)

  • Ninguno, cuando sea probado, diga: «Es Dios quien me prueba»; porque Dios ni es probado por el mal ni prueba a nadie. (Santiago 1, 13)

  • Porque ignoran intencionadamente que hace tiempo existieron unos cielos y también una tierra surgida del agua y establecida entre las aguas por la Palabra de Dios, (II Pedro 3, 5)

  • y que, por esto, el mundo de entonces pereció inundado por las aguas del diluvio, (II Pedro 3, 6)


“O medo excessivo nos faz agir sem amor, mas a confiança excessiva não nos deixa considerar o perigo que vamos enfrentar”. São Padre Pio de Pietrelcina