Löydetty 390 Tulokset: oráculo
Así haré con este lugar - oráculo de Yahveh - y con sus habitantes, hasta dejar a esta ciudad lo mismo que Tófet, (Jeremías 19, 12)
Y tras de esto - oráculo de Yahveh - entregaré al rey de Judá, Sedecías, a sus siervos y al pueblo que en esta ciudad quedare de la peste, de la espada y del hambre, en manos de Nabucodonosor, rey de Babilonia, y en manos de sus enemigos y de los que buscan su muerte. El los herirá a filo de espada. No les dará cuartel, ni les tendrá clemencia ni lástima.» (Jeremías 21, 7)
Porque me he fijado en esta ciudad para su daño, no para su bien - oráculo de Yahveh -: será puesta en manos del rey de Babilonia, que la incendiará.» (Jeremías 21, 10)
Mira que por ti va, población del valle, la Roca del Llano - oráculo de Yahveh -: vosotros, los que decís: «¿Quién se nos echará encima? ¿quién entrará en nuestras guaridas?» (Jeremías 21, 13)
(Yo os visitaré según el fruto de vuestras acciones - oráculo de Yahveh -.) Encenderé fuego en su bosque, y devorará todos sus contornos. (Jeremías 21, 14)
Mas si no oís estas palabras, por mí mismo os juro - oráculo de Yahveh - que en ruinas parará esta casa. (Jeremías 22, 5)
«- Juzgó la causa del cuitado y del pobrecillo.» - Pues mejor. ¿No es esto conocerme? - oráculo de Yahveh -. (Jeremías 22, 16)
Por mi vida - oráculo de Yahveh -, aunque fuese Konías, el hijo de Yoyaquim, rey de Judá, un sello en mi mano diestra, de allí te arrancaría. (Jeremías 22, 24)
¡Ay de los pastores que dejan perderse y desparrarmarse las ovejas de mis pastos! - oráculo de Yahveh -. (Jeremías 23, 1)
Pues así dice Yahveh, el Dios de Israel, tocante a los pastores que apacientan a mi pueblo: Vosotros habéis dispersado las ovejas mías, las empujasteis y no las atendisteis. Mirad que voy a pasaros revista por vuestras malas obras - oráculo de Yahveh -. (Jeremías 23, 2)
Y pondré al frente de ellas pastores que las apacienten, y nunca más estarán medrosas ni asustadas, ni faltará ninguna - oráculo de Yahveh -. (Jeremías 23, 4)
Mirad que días vienen - oráculo de Yahveh - en que suscitaré a David un Germen justo: reinará un rey prudente, practicará el derecho y la justicia en la tierra. (Jeremías 23, 5)