Löydetty 292 Tulokset: lado
Anchura de la entrada: diez codos. Las paredes laterales de la entrada: cinco codos de ancho por un lado y cinco por el otro. Midió su longitud: cuarenta codos; y su anchura: veinte codos. (Ezequiel 41, 2)
El edificio que bordeaba el patio por el lado occidental tenía setenta codos de anchura; y la pared de este edificio tenía un espesor de cinco codos, todo alrededor, con una longitud de noventa codos. (Ezequiel 41, 12)
Midió la longitud del edificio a lo largo del patio que tenía detrás, y sus galerías a cada lado: cien codos. El interior del Santo y los vestíbulos del atrio, (Ezequiel 41, 15)
una cara de hombre vuelta hacia la palmera de un lado y una cara de león hacia la palmera del otro lado; así por todo el ámbito de la Casa. (Ezequiel 41, 19)
Por debajo de las salas había una entrada del lado de oriente, que daba acceso desde el atrio exterior. (Ezequiel 42, 9)
Midió el lado oriental con su vara de medir: quinientos codos de perímetro, con la vara de medir. (Ezequiel 42, 16)
Luego midió el lado norte con la vara de medir: quinientos codos de perímetro. (Ezequiel 42, 17)
Después midió el lado sur con la vara de medir: quinientos codos (Ezequiel 42, 18)
de perímetro. Por el lado occidental midió con la vara de medir: quinientos codos. (Ezequiel 42, 19)
Al príncipe le tocará, a ambos lados del recinto de la parte reservada para el santuario y de la propiedad de la ciudad, a lo largo de la parte reservada para el santuario y de la propiedad de la ciudad, por el lado occidental hacia occidente, y por el oriental hacia oriente, una longitud igual a cada una de las partes, desde la frontera occidental hasta la frontera oriental (Ezequiel 45, 7)
Luego me llevó, por la entrada que estaba al lado del pórtico, a las salas del Santo reservadas a los sacerdotes, las que miraban al norte. Allí, en la extremidad occidental, había un espacio. (Ezequiel 46, 19)
Me llevó a la entrada de la Casa, y he aquí que debajo del umnbral de la Casa salía agua, en dirección a oriente, porque la fachada de la Casa miraba hacia oriente. El agua bajaba de debajo del lado derecho de la Casa, al sur del altar. (Ezequiel 47, 1)