Löydetty 16 Tulokset: felices

  • ¡Ojalá fuera siempre así su corazón para temerme y guadar todos mis mandamientos, y de esta forma ser eternamente felices, ellos y sus hijos! (Deuteronomio 5, 29)

  • Seguid en todo el camino que Yahveh vuestro Dios os ha trazado: así viviréis, seréis felices y prolongaréis vuestros días en la tierra que vais a tomar en posesión. (Deuteronomio 5, 33)

  • Y Yahveh nos mandó que pusiéramos en práctica todos estos preceptos, temiendo a Yahveh nuestro Dios, para que fuéramos felices siempre y nos permitiera vivir como el día de hoy. (Deuteronomio 6, 24)

  • Si alguien, después de haber oído las palabras de esta imprecación, se las promete felices en su corazón diciendo: «Aunque me conduzca en la terquedad de mi corazón, todo me irá bien, puesto que la abundancia de agua quitará la sed», (Deuteronomio 29, 18)

  • Es árbol de vida para los que a ella están asidos, felices son los que la abrazan. (Proverbios 3, 18)

  • los que los castigan, viven felices, y viene sobre ellos la bendición del bien. (Proverbios 24, 25)

  • Cohélet trabajó mucho en inventar frases felices, y escribir bien sentencias verídicas. (Eclesiastés 12, 10)

  • Nueve cosas que imagino tengo por felices en mi corazón, y una décima la diré con mi lengua: el hombre que recibe de sus hijos contento, que ve, en vida, la caída de sus enemigos. (Eclesiástico 25, 7)

  • Felices aquellos que te vieron y que se durmieron en el amor, que nosotros también viviremos sin duda. (Eclesiástico 48, 11)

  • Tu llevas la razón, Yahveh, cuando discuto contigo, no obstante, voy a tratar contigo un punto de justicia. ¿Por qué tienen suerte los malos, y son felices todos los felones? (Jeremías 12, 1)

  • sino que cumpliremos precisamente cuanto tenemos prometido, que es quemar incienso a la Reina de los Cielos y hacerle libaciones, como venimos haciendo nosotros y nuestros padres, nuestros reyes y nuestros jefes en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén, que nos hartábamos de pan, éramos felices y ningún mal nos sucedía. (Jeremías 44, 17)

  • He. Sus adversarios están a la cabeza, sus enemigos bien felices, porque Yahveh la ha afligido por sus muchos delitos. Sus niños han partido al cautiverio delante del adversario. (Lamentaciones 1, 5)


“Não nos preocupemos quando Deus põe à prova a nossa fidelidade. Confiemo-nos à Sua vontade; é o que podemos fazer. Deus nos libertará, consolará e enorajará.” São Padre Pio de Pietrelcina