Löydetty 660 Tulokset: cada

  • ¿Qué concluir, hermanos? Cuando os reunís, cada cual puede tener un salmo, una instrucción, una revelación, un discurso en lengua, una interpretación; pero que todo sea para edificación. (I Corintios 14, 26)

  • Si no hay quien interprete, guárdese silencio en la asamblea; hable cada cual consigo mismo y con Dios. (I Corintios 14, 28)

  • Pero cada cual en su rango: Cristo como primicias; luego los de Cristo en su Venida. (I Corintios 15, 23)

  • Cada día estoy a la muerte ¡sí hermanos! gloria mía en Cristo Jesús Señor nuestro, que cada día estoy en peligro de muerte. (I Corintios 15, 31)

  • Y Dios le da un cuerpo a su voluntad: a cada semilla un cuerpo peculiar. (I Corintios 15, 38)

  • Cada primer día de la semana, cada uno de vosotros reserve en su casa lo que haya podido ahorrar, de modo que no se hagan las colectas cuando llegue yo. (I Corintios 16, 2)

  • Mas todos nosotros, que con el rostro descubierto reflejamos como en un espejo la gloria del Señor, nos vamos transformando en esa misma imagen cada vez más gloriosos: así es como actúa el Señor, que es Espíritu. (II Corintios 3, 18)

  • Porque es necesario que todos nosotros seamos puestos al descubierto ante el tribunal de Cristo, para que cada cual reciba conforme a lo que hizo durante su vida mortal, el bien o el mal. (II Corintios 5, 10)

  • Cada cual dé según el dictamen de su corazón, no de mala gana ni forzado, pues: Dios ama al que da con alegría. (II Corintios 9, 7)

  • No nos gloriamos desmesuradamente a costa de los trabajos de los demás; sino que esperamos, mediante el progreso de vuestra fe, engrandecernos cada vez más en vosotros conforme a nuestra norma, (II Corintios 10, 15)

  • Examine cada cual su propia conducta y entonces tendrá en sí solo, y no en otros, motivo para glorificarse, (Gálatas 6, 4)

  • pues cada uno tiene que llevar su propia carga. (Gálatas 6, 5)


“A prática das bem-aventuranças não requer atos de heroísmo, mas a aceitação simples e humilde das várias provações pelas quais a pessoa passa.” São Padre Pio de Pietrelcina