Löydetty 2034 Tulokset: Cam
Al día siguiente nos hicimos a la mar y llegamos a la altura de Quíos; al otro día atracamos en Samos y, después de hacer escala en Trogilión, llegamos al día siguiente a Mileto. (Hechos 20, 15)
Encontramos una nave que partía para Fenicia; nos embarcamos y partimos. (Hechos 21, 2)
Cuando se nos pasaron aquellos días, salimos y nos pusimos en camino. Todos nos acompañaron con sus mujeres e hijos, hasta las afueras de la ciudad. En la playa nos pusimos de rodillas y oramos; (Hechos 21, 5)
Yo perseguí a muerte a este Camino, encadenando y arrojando a la cárcel a hombres y mujeres, (Hechos 22, 4)
como puede atestiguármelo el Sumo Sacerdote y todo el Consejo de ancianos. De ellos recibí también cartas para los hermanos de Damasco y me puse en camino con intención de traer también encadenados a Jerusalén a todos los que allí había, para que fueran castigados. (Hechos 22, 5)
«Pero yendo de camino, estando ya cerca de Damasco, hacia el mediodía, me envolvió de repente una gran luz venida del cielo; (Hechos 22, 6)
«En cambio te confieso que según el Camino, que ellos llaman secta, doy culto al Dios de mis padres, creo en todo lo que se encuentra en la Ley y está escrito en los Profetas (Hechos 24, 14)
Félix, que estaba bien informado en lo referente al Camino, les dio largas diciendo: «Cuando baje el tribuno Lisias decidiré vuestro asunto.» (Hechos 24, 22)
le pedían una gracia contra él, que le hiciera trasladar a Jerusalén, mientras preparaban una celada para matarle en el camino. (Hechos 25, 3)
y al medio día, yendo de camino vi, oh rey, una luz venida del cielo, más resplandeciente que el sol, que me envolvió a mí y a mis compañeros en su resplandor. (Hechos 26, 13)
Pero tropezaron contra un lugar con mar por ambos lados, y encallaron allí la nave; la proa clavada, quedó inmóvil; en cambio la popa, sacudida violentamente, se iba deshaciendo. (Hechos 27, 41)
Ellos estaban esperando que se hincharía o que caería muerto de repente; pero después de esperar largo tiempo y viendo que no le ocurría nada anormal, cambiaron de parecer y empezaron a decir que era un dios. (Hechos 28, 6)