Löydetty 40 Tulokset: senderos
Al justo que huía de la ira de su hermano, ella lo guió por senderos rectos; le mostró la realeza de Dios, y le dio el conocimiento de las cosas santas; lo hizo prosperar en sus duros trabajos y multiplicó el fruto de sus esfuerzos; (Sabiduría 10, 10)
Los senderos están desolados, nadie transita por los caminos. Se ha roto la alianza, se rechaza a los testigos, no se tiene en cuenta a nadie. (Isaías 33, 8)
Conduciré a los ciegos por un camino que ignoran, los guiaré por senderos desconocidos; cambiaré las tinieblas en luz delante de ellos, y el suelo escarpado en una llanura. Estas son las cosas que haré, y no dejaré de hacerlas. (Isaías 42, 16)
De todas mis montañas yo haré un camino y mis senderos serán nivelados. (Isaías 49, 11)
No conocen el camino de la paz, en sus senderos, no existe el derecho. Abren para sí mismos sendas tortuosas: el que las recorre, no conoce la paz. (Isaías 59, 8)
Así habla el Señor: Deténgase sobre los caminos y miren, pregunten a los senderos antiguos dónde está el buen camino, y vayan por él: así encontrarán tranquilidad para sus almas. Pero ellos dijeron: "¡No iremos!". (Jeremías 6, 16)
¿Hasta cuándo el país estará de duelo y se secará toda la hierba del campo? Por la maldad de los que habitan en él perecen las bestias y los pájaros. Porque ellos dicen: "¡Él no ve nuestros senderos!". (Jeremías 12, 4)
¡Mi pueblo, en cambio, se ha olvidado de mí! Ellos queman incienso a la Nada y han tropezado en sus caminos, en los senderos antiguos, para ir por sendas desviadas, por un camino sin trazar. (Jeremías 18, 15)
Cercó mis caminos con piedras talladas, entorpeció mis senderos. (Lamentaciones 3, 9)
no han comprendido sus senderos. Tampoco sus hijos la han alcanzado y se han alejado de sus caminos. (Baruc 3, 21)
Ni siquiera los hijos de Agar, que buscan la ciencia sobre la tierra, ni los mercaderes de Merrán y de Temán, inventores de fábulas y buscadores de inteligencia, han conocido el camino de la sabiduría, ni se han acordado de sus senderos. (Baruc 3, 23)
Por eso voy a obstruir su camino con espinas, la cercaré con un muro, y no encontrará sus senderos. (Oseas 2, 8)