Löydetty 29 Tulokset: mejores
sino que imitaste a los reyes de Israel e incitaste a Judá y a los habitantes de Jerusalén a que se prostituyeran como la familia de Ajab. También has asesinado a tus hermanos, la familia de tu padre, que eran mejores que tú. (II Crónicas 21, 13)
Por eso, no entreguen sus hijas a los hijos de ellos ni casen a sus hijos con las hijas de esa gente. No busquen nunca su paz ni su bienestar. Así ustedes llegarán a ser fuertes, comerán los mejores frutos de la tierra, y la dejarán en herencia a sus hijos para siempre’. (Esdras 9, 12)
de sus mejores provincias -la región de la India, Media y Lidia- que luego entregaron al rey Eumenes. (I Macabeos 8, 8)
Entonces se decidieron por Alejandro porque, a su parecer, les hacía mejores propuestas de paz, y fueron siempre sus aliados. (I Macabeos 10, 47)
Sin mostrar ningún aprecio por los valores nacionales, juzgaban las glorias de los griegos como las mejores. (II Macabeos 4, 15)
nardo y azafrán, caña aromática y canela, con todos los árboles de incienso, mirra y áloe, con los mejores perfumes. (Cantar 4, 14)
Las mandrágoras exhalan su perfume, los mejores frutos están a nuestro alcance: los nuevos y los añejos, amado mío, los he guardado para ti. (Cantar 7, 14)
El estómago asimila toda clase de alimentos, pero hay unos mejores que otros. (Eclesiástico 36, 18)
Una mujer acepta cualquier marido, pero unas jóvenes son mejores que otras. (Eclesiástico 36, 21)
Por medio de tus servidores has insultado al Señor y has dicho: Con mis numerosos carros escalé la cima de las montañas, los rincones inaccesibles del Líbano. Talé sus cedros más altos, sus mejores cipreses; llegué hasta su último extremo, hasta lo más espeso de su bosque. (Isaías 37, 24)
Agrégale trozos de carne, los mejores trozos -la pata y la espalda-, llénala con los mejores huesos. (Ezequiel 24, 4)
Los comerciantes de Sabá y de Raemá traficaban contigo: entregaban los mejores bálsamos, toda clase de piedras preciosas y oro, a cambio de tus mercaderías. (Ezequiel 27, 22)