Löydetty 51 Tulokset: míos

  • ¡Apiádense, apiádense de mí, amigos míos, porque me ha herido la mano de Dios! (Job 19, 21)

  • Por lo tanto, hijos míos, ardan de celo por la Ley, dando la vida por la Alianza de nuestros padres. (I Macabeos 2, 50)

  • Por eso, hijos míos, sean valientes, y manténganse firmes en el cumplimiento de la Ley, ya que gracias a ella serán colmados de gloria. (I Macabeos 2, 64)

  • En cuanto a las cuestiones de detalle, he dado instrucciones a sus enviados y a los míos, para que las discutan con ustedes. (II Macabeos 11, 20)

  • Yo entré en mi jardín, hermana mía, novia mía; recogí mi mirra y mi bálsamo, comí mi miel y mi panal, bebí mi vino y mi leche. ¡Coman, amigos míos, beban, y embriáguense de amor! (Cantar 5, 1)

  • Hijos míos, observen en paz mi enseñanza. Sabiduría escondida y tesoro invisible: ¿de qué sirven una cosa y la otra? (Eclesiástico 41, 14)

  • Porque los pensamientos de ustedes no son los míos, ni los caminos de ustedes son mis caminos -oráculo del Señor-. (Isaías 55, 8)

  • Al poner su umbral junto al mío y los postes de sus puertas al lado de los míos, con un simple muro de por medio, los israelitas mancharon mi santo Nombre con las abominaciones que cometieron, y yo los devoré en mi indignación. (Ezequiel 43, 8)

  • ¡Son míos el oro y la plata! -oráculo del Señor de los ejércitos-. (Ageo 2, 8)

  • Los discípulos se sorprendieron por estas palabras, pero Jesús continuó diciendo: «Hijos míos, ¡qué difícil es entrar en el Reino de Dios! (Marcos 10, 24)

  • Otro le dijo: «Te seguiré, Señor, pero permíteme antes despedirme de los míos». (Lucas 9, 61)

  • Hijos míos, ya no estaré mucho tiempo con ustedes. Ustedes me buscarán, pero yo les digo ahora lo mismo que dije a los judíos: "A donde yo voy, ustedes no pueden venir". (Juan 13, 33)


“Quando te encontrares diante de Deus, na oração considera-te banhado na luz da verdade, fala-lhe se puderes, deixa simplesmente que te veja e não tenhas preocupação alguma”. São Padre Pio de Pietrelcina