Löydetty 493 Tulokset: estás

  • Estas son las etapas que recorrieron los israelitas cuando salieron de Egipto, agrupados por regimientos, bajo la conducción de Moisés y Aarón. (Números 33, 1)

  • Estas son las personas que designó el Señor para repartir el territorio de Canaán como herencia entre los israelitas. (Números 34, 29)

  • la comunidad juzgará, conforme a estas reglas, entre el homicida y el vengador del homicidio, (Números 35, 24)

  • Estas disposiciones serán una norma jurídica para ustedes y para sus descendientes, en cualquier lugar donde se encuentren. (Números 35, 29)

  • Entonces Moisés, por orden del Señor, dio estas instrucciones a los israelitas: La tribu de los descendientes de José tiene razón. (Números 36, 5)

  • Estas son las palabras que Moisés dirigió a todo Israel, al otro lado del Jordán, en el desierto, en la Arabá, frente a Suf, entre Parán, Tofel y Labán, Jaserot y Dizahab. (Deuteronomio 1, 1)

  • Obsérvenlos y pónganlos en práctica, porque así serán sabios y prudentes a los ojos de los pueblos, que al oír todas estas leyes, dirán: "¡Realmente es un pueblo sabio y prudente esta gran nación!". (Deuteronomio 4, 6)

  • Y cuando estés angustiado, porque te habrán sucedido todas estas cosas -al cabo de los años- volverás al Señor, tu Dios, y lo escucharás. (Deuteronomio 4, 30)

  • A ti se te hicieron ver todas estas cosas, para que sepas que el Señor es Dios, y que no hay otro dios fuera de él. (Deuteronomio 4, 35)

  • Estas ciudades eran: para los rubenitas, Béser, que estaba situada en el desierto, en el altiplano; para los gaditas, Ramot de Galaad; y para los manasitas, Golán de Basán. (Deuteronomio 4, 43)

  • y estas son las normas, los preceptos y las leyes que les dictó después que salieron de Egipto, (Deuteronomio 4, 45)

  • Estas son las palabras que el Señor les dirigió en la montaña, cuando todos ustedes estaban reunidos. Él les habló con voz potente, desde el fuego, la nube y una densa oscuridad. No añadió nada más, sino que escribió esas palabras en las dos tablas de piedra que me entregó. (Deuteronomio 5, 22)


“Os talentos de que fala o Evangelho são os cinco sentidos, a inteligência e a vontade. Quem tem mais talentos, tem maior dever de usá-los para o bem dos outros.” São Padre Pio de Pietrelcina