Löydetty 1130 Tulokset: enemigos de Judá

  • y si cada guerrero cruza el Jordán, bajo las órdenes del Señor, hasta que expulse a sus enemigos delante de él, (Números 32, 21)

  • Los nombres de esas personas son los siguientes: Por la tribu de Judá, Caleb, hijo de Iefuné; (Números 34, 19)

  • Pero el Señor me dijo: "Ordénales que no suban a combatir, porque yo no estoy más en medio de ellos. Si lo hacen, serán derrotados por sus enemigos". (Deuteronomio 1, 42)

  • Porque el Señor expulsará a todos los enemigos que encuentres a tu paso, como te lo ha anunciado. (Deuteronomio 6, 19)

  • Pero cuando pasen el Jordán y se establezcan en la tierra que el Señor, su Dios, les dará como herencia, cuando él les dé el descanso, librándolos de todos los enemigos que estén a su alrededor, y ustedes se sientan seguros, (Deuteronomio 12, 10)

  • Cuando salgas a combatir contra tus enemigos y veas caballos, carros de guerra y un ejército más numeroso que tú, no les tengas miedo: el Señor, tu Dios, el mismo que te hizo salir de Egipto, está contigo. (Deuteronomio 20, 1)

  • en estos términos: "Escucha, Israel. Ahora ustedes están próximos a entrar en batalla contra sus enemigos. ¡Tengan valor! No teman, ni se angustien, ni tiemblen ante ellos, (Deuteronomio 20, 3)

  • porque el Señor, su Dios, los acompaña, y él combatirá en favor de ustedes para darles la victoria sobre sus enemigos". (Deuteronomio 20, 4)

  • En cuanto a las mujeres, los niños, el ganado y cualquier otra cosa que haya en la ciudad, podrás retenerlos como botín, y disfrutar de los despojos de los enemigos que el Señor, tu Dios, te entrega. (Deuteronomio 20, 14)

  • Cuando salgas a combatir contra tus enemigos, y el Señor, tu Dios, los ponga en tus manos, si tomas algunos prisioneros (Deuteronomio 21, 10)

  • Cuando emprendas una campaña contra tus enemigos, evita cuidadosamente toda acción indecente. (Deuteronomio 23, 10)

  • Porque el Señor, tu Dios, recorrerá el campamento para protegerte y para poner a tus enemigos en tus manos. Por eso tu campamento será un lugar santo, y el Señor no debe ver en él nada indecente. De lo contrario se apartaría de ti. (Deuteronomio 23, 15)


“Onde não há obediência, não há virtude. Onde não há virtude, não há bem, não há amor; e onde não há amor, não há Deus; e sem Deus não se chega ao Paraíso. Tudo isso é como uma escada: se faltar um degrau, caímos”. São Padre Pio de Pietrelcina