Löydetty 31 Tulokset: edificó

  • Iojanán fue padre de Azarías, el cual ejerció el sacerdocio en el Templo que Salomón edificó en Jerusalén; (I Crónicas 5, 36)

  • Ellos servían como cantores ante la Morada -la Carpa del Encuentro- hasta que Salomón edificó el Templo del Señor en Jerusalén, y prestaban servicio conforme a su reglamento. (I Crónicas 6, 17)

  • Su hija fue Seerá, que edificó Bet Jorón, la de Arriba y la de Abajo, y Uzén Seerá. (I Crónicas 7, 24)

  • Los hijos de Elpáal fueron Eber, Misán y Sémed, el cual edificó Onó, Lud y sus poblados adyacentes. (I Crónicas 8, 12)

  • Allí edificó David un altar al Señor, y ofreció holocaustos y sacrificios de comunión. Invocó al Señor, y él le respondió enviando fuego del cielo sobre el altar del holocausto. (I Crónicas 21, 26)

  • Edificó ciudades fortificadas en Judá, porque el país estaba en paz, y durante aquellos años nadie le hizo la guerra ya que el Señor le había dado tranquilidad. (II Crónicas 14, 5)

  • Construyó asimismo ciudades en la montaña de Judá, y edificó fortines y torres en los bosques. (II Crónicas 27, 4)

  • Ajaz juntó los utensilios de la Casa de Dios y los hizo pedazos, cerró las puertas de la Casa del Señor y se edificó altares en todos los rincones de Jerusalén; (II Crónicas 28, 24)

  • Edificó altares en la Casa del Señor, de la que el mismo Señor había dicho: "En Jerusalén estará mi Nombre para siempre". (II Crónicas 33, 4)

  • Edificó altares a todo el Ejército de los cielos en los dos atrios de la Casa del Señor. (II Crónicas 33, 5)

  • Su plegaria y cómo fue escuchado, todo su pecado y su prevaricación, los sitios donde edificó lugares altos y erigió postes sagrados e ídolos, antes de humillarse, están escritos en las Memorias de Jozai. (II Crónicas 33, 19)

  • Luego dijo a los levitas que instruían a todo Israel y estaban consagrados al Señor: "Pongan el Arca santa en el Templo que edificó Salomón, hijo de David, rey de Israel: ya no tendrán que llevarla sobre los hombros. Ahora sirvan al Señor, su Dios, y a su pueblo Israel. (II Crónicas 35, 3)


“Que o Espírito Santo guie a sua inteligência, faça-o descobrir a verdade escondida na Sagrada Escritura e inflame a sua vontade para praticá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina