Löydetty 60 Tulokset: Ramas

  • y sólo queda un residuo; o como cuando se golpea un olivo: quedan dos o tres aceitunas en lo alto de la copa, cuatro o cinco en las ramas del árbol frutal -oráculo del Señor, Dios de Israel-. (Isaías 17, 6)

  • La plaza fuerte está solitaria, es un pastizal abierto, abandonado como el desierto. Allí va a pacer el ternero, allí se recuesta y deshoja las ramas. (Isaías 27, 10)

  • Al secarse, se quiebran las ramas, y vienen mujeres a prenderles fuego. Porque este es un pueblo sin inteligencia: por eso su Creador no le tiene compasión, el que lo formó no se apiada de él. (Isaías 27, 11)

  • "Olivo frondoso de hermosa figura" es el nombre que te dio el Señor. Pero en medio de un gran estruendo, él prendió fuego a su follaje y arden sus ramas. (Jeremías 11, 16)

  • Arrancó la más alta de sus ramas y la llevó a un país de comerciantes, la puso en una ciudad de mercaderes. (Ezequiel 17, 4)

  • Ella brotó y se convirtió en una vid, exuberante, de tamaño pequeño, que volvía sus ramas hacia el águila y tenía sus raíces debajo de ella. Así se convirtió en una vid, produjo ramas y dio sarmientos. (Ezequiel 17, 6)

  • Pero había otra águila grande, de grandes alas y abundante plumaje, y esa vid le tendió ansiosamente sus raícesy dirigió sus ramas hacia ella, para que la regara mejor que el terreno donde había sido plantada. (Ezequiel 17, 7)

  • Así habla el Señor: Yo también tomaré la copa de un gran cedro, cortaré un brote de la más alta de sus ramas, y lo plantaré en una montaña muy elevada: (Ezequiel 17, 22)

  • lo plantaré en la montaña más alta de Israel. Él echará ramas y producirá frutos, y se convertirá en un magnífico cedro. Pájaros de todas clases anidarán en él, habitarán a la sombra de sus ramas. (Ezequiel 17, 23)

  • Le salieron unas ramas vigorosas, que fueron cetros de soberanos. Su talla se elevó por encima del follaje, era bien visible por su altura, por la abundancia de sus ramas. (Ezequiel 19, 11)

  • De su rama ha salido un fuego que devoró sus ramas y sus frutos. Ya no hay en ella ninguna rama vigorosa, ningún cetro de soberanos. Esta es una lamentación, y se la canta como tal. (Ezequiel 19, 14)

  • Por eso superó en altura a todos los árboles del campo; su ramaje se hizo frondoso y se alargaron sus ramas, regadas por las aguas caudalosas, cuando él echaba sus brotes. (Ezequiel 31, 5)


“Quando o dia seguinte chegar, ele também será chamado de hoje e, então, você pensará nele. Tenha sempre muita confiança na Divina Providência.” São Padre Pio de Pietrelcina