Löydetty 132 Tulokset: Cortinas de Lino Fino

  • ellos llevarán los tapices de la Morada, la Carpa del Encuentro y su toldo, el toldo de cuero fino que está sobre ella y el cortinado que está a la entrada de la Carpa del Encuentro; (Números 4, 25)

  • las cortinas del atrio, la cortina de la entrada del atrio que rodea la Morada y el altar, y también sus cuerdas y todos los accesorios que se emplean en su servicio: ellos se encargarán de hacer todo lo necesario. (Números 4, 26)

  • Y a esa obra del pecado, a ese ternero que ustedes habían fabricado, lo tomé, lo quemé y lo molí, hasta convertirlo en polvo muy fino, y después lo arrojé en el torrente que baja de la montaña. (Deuteronomio 9, 21)

  • No vestirás ropa tejida de lana mezclada con lino. (Deuteronomio 22, 11)

  • El más fino y delicado entre los hombres de tu pueblo mirará con odio a su hermano, a la esposa que dormía en sus brazos y a los hijos que todavía le queden, (Deuteronomio 28, 54)

  • En realidad, los había hecho subir a la terraza, ocultándolos entre unos haces de lino extendidos allí. (Josué 2, 6)

  • Entonces Sansón les dijo: "Les voy a proponer una adivinanza. Si me dan la solución correcta dentro de los siete días que dura el banquete, yo les daré treinta prendas de lino y treinta trajes de fiesta. (Jueces 14, 12)

  • Cuando estaban por llegar a Lejí, los filisteos le salieron al encuentro dando gritos de triunfo. Entonces el espíritu del Señor se apoderó de él: las cuerdas que sujetaban sus brazos fueron como hilos de lino quemados por el fuego y las ataduras se deshicieron entre sus manos. (Jueces 15, 14)

  • Samuel servía en la presencia del Señor; era un niño, y llevaba ceñido el efod de lino. (I Samuel 2, 18)

  • Entonces el rey dijo a Doeg: "Vuélvete y mátalos tú". Doeg se volvió y acometió contra los sacerdotes: así mató aquel día a ochenta y cinco hombres que vestían el efod de lino. (I Samuel 22, 18)

  • David, que sólo llevaba ceñido un efod de lino, iba danzando con todas sus fuerzas delante del Señor. (II Samuel 6, 14)

  • Salomón recubrió de oro fino el interior de la Casa e hizo pasar cadenas de oro por delante del lugar santísimo, al que revistió de oro. (I Reyes 6, 21)


“O Anjo de Deus não nos abandona jamais.” São Padre Pio de Pietrelcina