Löydetty 34 Tulokset: �Salgan
y haré que este pueblo se gane el favor de los egipcios, de manera que cuando ustedes salgan, no se vayan con las manos vacías. (Exodo 3, 21)
Esa misma noche, el Faraón mandó llamar a Moisés y a Aarón, y les dijo: "Salgan inmediatamente de en medio de mi pueblo, ustedes y todos los israelitas, y vayan a dar culto al Señor, como lo habían pedido. (Exodo 12, 31)
Se fueron al caer la noche, cuando estaban por cerrarse las puertas de la ciudad, y no sé adónde habrán ido. Salgan en seguida detrás de ellos, porque todavía pueden alcanzarlos". (Josué 2, 5)
"Ordena a los sacerdotes que llevan el Arca del Testimonio que salgan del Jordán". (Josué 4, 16)
Entonces Josué ordenó a los sacerdotes que llevaban el Arca: "Salgan del Jordán". (Josué 4, 17)
Yo y toda la gente que irá conmigo nos acercaremos a la ciudad, y cuando ellos salgan contra nosotros, como lo hicieron la primera vez, nosotros huiremos. (Josué 8, 5)
Estén alerta, y cuando las jóvenes de Silo salgan a danzar en coros, ustedes saldrán de las viñas y raptarán cada uno a una de las jóvenes de Silo. Luego se irán al país de Benjamín. (Jueces 21, 21)
Abner propuso entonces a Joab: "Que salgan unos cuantos muchachos y midan sus armas delante de nosotros". "Muy bien", replicó Joab. (II Samuel 2, 14)
No tendrán necesidad de combatir en esta ocasión: deténganse allí sin moverse y verán la salvación que el Señor les tienen preparada. ¡No teman ni se acobarden, Judá y Jerusalén! Salgan mañana a enfrentarse con ellos, porque el Señor estará con ustedes". (II Crónicas 20, 17)
Reunió a los sacerdotes y a los levitas, y les dijo: "Salgan todos los años por las ciudades de Judá, y recojan dinero de todo Israel para restaurar la Casa de nuestro Dios. Háganlo lo antes posible". Pero los levitas no se apresuraron a hacerlo. (II Crónicas 24, 5)
y que debían anunciarlo y publicar la proclama por todas sus ciudades y por Jerusalén, en estos términos: "Salgan a la montaña y traigan ramas de olivo, de olivo silvestre, de mirto, de palmera y de árboles frondosos, para hacer chozas, como está escrito". (Nehemías 8, 15)
¡que en lugar de trigo salgan espinas, y en vez de cebada, ortigas punzantes! (Job 31, 40)