Löydetty 40 Tulokset: viejo

  • No abandones a un viejo amigo: el nuevo no se le equiparará. Nuevo amigo, vino nuevo; déjalos que envejezcan y los tomarás con gusto. (Sirácides (Eclesiástico) 9, 10)

  • Hay tres clases de personas que aborrezco y cuya presencia no la soporto: un pobre orgulloso, un rico que miente y un viejo vicioso y tonto. (Sirácides (Eclesiástico) 25, 2)

  • Entre la gente del pueblo pelearán unos con otros, o unos vecinos con otros; el joven le reprenderá al viejo y el hombre sin apellido al noble, (Isaías 3, 5)

  • Este tal Jeconías, ¿es, acaso, un trasto viejo e inservible que ya nadie quiere? ¿Por qué han sido expulsados él y su familia y echados a un país que no conocían? (Jeremías 22, 28)

  • Contigo golpeé a hombres y mujeres, al viejo y al muchacho, al joven y a la doncella. (Jeremías 51, 22)

  • Nadie remienda un vestido viejo con un pedazo de tela nueva, porque el pedazo nuevo tiraría del vestido y la rotura se haría mayor. (Evangelio según San Mateo 9, 16)

  • Nadie remienda un vestido viejo con un pedazo de género nuevo, porque la tela nueva encoge, tira de la tela vieja, y se hace más grande la rotura. (Evangelio según San Marcos 2, 21)

  • Zacarías dijo al ángel: «¿Quién me lo puede asegurar? Yo ya soy viejo y mi esposa también.» (Evangelio según San Lucas 1, 18)

  • Jesús les propuso además esta comparación: «Nadie saca un pedazo de un vestido nuevo para remendar otro viejo. ¿Quién va a romper algo nuevo, para que después el pedazo tomado del nuevo no le venga bien al vestido viejo? (Evangelio según San Lucas 5, 36)

  • Nicodemo le dijo: «¿Cómo renacerá el hombre ya viejo? ¿Quién volverá al seno de su madre?» (Evangelio según San Juan 3, 4)

  • En verdad, cuando eras joven, tú mismo te ponías el cinturón e ibas a donde querías. Pero cuando llegues a viejo, abrirás los brazos y otro te amarrará la cintura y te llevará a donde no quieras.» (Evangelio según San Juan 21, 18)

  • Como ustedes saben, el hombre viejo que está en nosotros ha sido crucificado con Cristo. Las fuerzas vivas del pecado han sido destruidas para que no sirvamos más al pecado. (Carta a los Romanos 6, 6)


“Ele e ouvir a Sua voz por meio das Suas inspirações e iluminações interiores.” São Padre Pio de Pietrelcina