Löydetty 134 Tulokset: sombra de tus alas

  • ¿Quién sabe cómo debería vivir el hombre durante sus días contados y frágiles que pasan como sombra? ¿Quién le revelará al hombre lo que pasará bajo el sol después de él? (Eclesiastés (Qohelet) 6, 12)

  • La felicidad no es para el malo; no prolongará sus días sino que pasará como una sombra porque no tiene el temor de Dios). (Eclesiastés (Qohelet) 8, 13)

  • No maldigas al rey ni siquiera de pensamiento; ni maldigas al poderoso, ni siquiera en el secreto de tu pieza: un pajarito del cielo podría llevarle el rumor, un par de alas le daría a conocer el asunto. (Eclesiastés (Qohelet) 10, 20)

  • Como manzano entre los arbustos, así es mi amado entre los jóvenes. Estoy sentada a su sombra deseada y su fruto me es dulce al paladar. (Cantar 2, 3)

  • Con el tiempo se olvidarán de nuestro nombre, nadie más pensará en lo que hicimos; nuestra vida pasa como la sombra de una nube, se desvanece como niebla a los rayos del sol. (Sabiduría 2, 4)

  • Nuestra vida es sólo el paso de una sombra, cuando llega el fin es sin vuelta: una vez sellado, nadie vuelve. (Sabiduría 2, 5)

  • Todo eso pasó como una sombra, como un rumor que se disipa, (Sabiduría 5, 9)

  • O como el pájaro que atraviesa el espacio y cuyos vestigios de su carrera nadie encuentra, que no deja ninguna señal de su trayecto. Sus plumas rozaron el aire leve, un silbido se produjo al partirlo, batiendo sus alas se abrió camino, pero después, ¿quién encontró alguna huella de su vuelo? (Sabiduría 5, 11)

  • Le dio al pueblo santo el pago por sus penas, los guió por un camino asombroso. Los cubría con su sombra durante el día y los alumbraba como un astro durante la noche. (Sabiduría 10, 17)

  • Se vio a una nube que cubría el campamento con su sombra y que aparecía la tierra seca en medio del agua; se abrió en el Mar Rojo un paso seguro, una verde llanura reemplazó a las olas impetuosas, (Sabiduría 19, 7)

  • Mientras estos marchen bien, serán como tu sombra, e incluso mandarán a la gente de tu casa. (Sirácides (Eclesiástico) 6, 11)

  • Las esperanzas vanas y engañosas son para los imbéciles: los sueños dan alas a los insensatos. (Sirácides (Eclesiástico) 34, 1)


“Para consolar uma alma na sua dor, mostre-lhe todo o bem que ela ainda pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina