Löydetty 37 Tulokset: problemas
Por eso yo les digo: No anden preocupados por su vida con problemas de alimentos, ni por su cuerpo con problemas de ropa. ¿No es más importante la vida que el alimento y más valioso el cuerpo que la ropa? (Evangelio según San Mateo 6, 25)
No se preocupen por el día de mañana, pues el mañana se preocupará por sí mismo. A cada día le bastan sus problemas. (Evangelio según San Mateo 6, 34)
Si esto llega a oídos de Pilato, nosotros lo arreglaremos para que no tengan problemas.» Los soldados recibieron el dinero e hicieron como les habían dicho. (Evangelio según San Mateo 28, 14)
Fueron a la prisión acompañados por un grupo de amigos de Pablo y les pidieron que se marcharan, diciéndoles: «¡Cómo íbamos a pensar que ustedes fueran muy buena gente!» Y cuando Pablo y Silas estaban para irse, les rogaron: «Ahora que se van libres, por favor, no nos hagan problemas por haberles hablado duramente». (Hecho de los Apóstoles 16, 39)
¿No saben que juzgaremos a los ángeles? ¿Y por qué no, entonces, los problemas de cada día? (1º Carta a los Corintios 6, 3)
Coman, pues, todo lo que se vende en el mercado sin plantearse problemas de conciencia, (1º Carta a los Corintios 10, 25)
Si alguien que no comparte la fe los invita, vayan, si quieren, y coman de todo lo que les sirvan sin plantearse problemas de conciencia. (1º Carta a los Corintios 10, 27)
Nos sobrevienen pruebas de toda clase, pero no nos desanimamos; estamos entre problemas, pero no desesperados; (2º Carta a los Corintios 4, 8)
No me obliguen, cuando esté ante ustedes, a actuar con autoridad, como estoy decidido y como me atreveré a hacerlo con algunos que piensan que yo no quiero crearme problemas. (2º Carta a los Corintios 10, 2)
Los que tratan de imponerles la circuncisión son sobre todo gente preocupada por ser más considerados en el mundo; no quieren que la cruz de Cristo les acarree problemas. (Carta a los Gálatas 6, 12)
De hecho, no tengo a ningún otro que se preocupe tanto como él por sus problemas. (Carta a los Filipenses 2, 20)
Por eso pienso enviárselo apenas vea claros mis problemas. (Carta a los Filipenses 2, 23)