Löydetty 432 Tulokset: levitas servidores
Todo el pueblo permanecía de pie por ambos lados del Arca, con sus jefes, secretarios y jueces. Al frente suyo estaban los sacerdotes y los levitas que portaban el Arca de Yavé; israelitas de raza y forasteros estaban juntos. La mitad del pueblo se extendía hacia el cerro Garizim y la otra mitad cerca del Ebal, según lo mandado por Moisés referente a la manera de bendecir a Israel. (Josué 8, 33)
Pues en ese caso no podríamos hacer un pacto con ustedes.» Respondieron a Josué: «Servidores tuyos somos.» Josué les preguntó: «¿Quiénes son ustedes y de dónde vienen?» (Josué 9, 8)
Contestaron: «De un país muy lejano vienen tus servidores, por la fama de Yavé, tu Dios, pues sabemos de su poder y de todo lo que hizo en Egipto, (Josué 9, 9)
Los dirigentes y demás habitantes de nuestro pueblo nos dijeron: Provéanse de alimentos para un largo viaje, ubíquenlos y díganles: Servidores somos de ustedes; hagan alianza con nosotros. (Josué 9, 11)
al lado oriental del Jordán. Por otra parte los levitas no recibieron herencia, pero en lugar de ellos, los hijos de José formaban dos tribus: Manasés y Efraím. Los levitas no tuvieron tierras sino algunas ciudades para vivir y el campo alrededor para mantener a sus bestias y ganados. (Josué 14, 4)
Los levitas no tendrán parte al lado de sus hermanos, pues ya recibieron su herencia al ser sacerdotes de Yavé. En cuanto a los de Gad y de Rubén y de la media tribu de Manasés, ya recibieron de Moisés su parte al oriente del Jordán.» (Josué 18, 7)
Así, pues, los hijos de Israel dieron a los levitas estas ciudades con sus alrededores, como lo mandó Yavé por medio de Moisés, distribuyéndolas a cada uno por suerte. (Josué 21, 8)
A los demás hijos de Quehat, levitas de grado inferior repartidos en sus familias, se les dieron: de la tribu de Efraím, (Josué 21, 20)
También a los hijos de Guersón, levitas de inferior grado, Josué dio de la media tribu de Manasés dos ciudades con sus alrededores, a saber: Golán, en Basán, que era ciudad de refugio, y Astarot. (Josué 21, 27)
Asimismo a los hijos de Merarí, levitas de inferior grado, se les dieron, según sus familias: Jecnán, Carta, (Josué 21, 34)
Así las ciudades de los levitas en medio de la herencia de los hijos de Israel fueron cuarenta y ocho, (Josué 21, 41)
sino como una prueba entre nosotros y ustedes, entre nuestra descendencia y la de ustedes, de que somos también servidores de Yavé y tenemos derecho a ofrecer holocaustos y víctimas pacíficas; lo hicimos para que los hijos de ustedes no puedan decir a los nuestros: Ustedes no tienen parte con Yavé. (Josué 22, 27)