Löydetty 3887 Tulokset: ira de Dios

  • Quien reconozca que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él y él en Dios. (1º Carta de Juan 4, 15)

  • Por nuestra parte, hemos conocido el amor que Dios nos tiene, y hemos creído en él. Dios es amor: el que permanece en el amor, permanece en Dios y Dios en él. (1º Carta de Juan 4, 16)

  • Si uno dice «Yo amo a Dios» y odia a su hermano, es un mentiroso. Si no ama a su hermano, a quien ve, no puede amar a Dios, a quien no ve. (1º Carta de Juan 4, 20)

  • Pues este es el mandamiento que recibimos de él: el que ama a Dios, ame también a su hermano. (1º Carta de Juan 4, 21)

  • Todo el que cree que Jesús es el Mesías, ha nacido de Dios. Si amamos al que da la vida, amamos también a quienes han nacido de él; (1º Carta de Juan 5, 1)

  • y por eso, cuando amamos a Dios y cumplimos sus mandatos, con toda certeza sabemos que amamos a los hijos de Dios. (1º Carta de Juan 5, 2)

  • Amar a Dios es guardar sus mandatos, y sus mandatos no son pesados. (1º Carta de Juan 5, 3)

  • Todo lo que ha nacido de Dios vence al mundo, y la victoria en que el mundo ha sido vencido es nuestra fe. (1º Carta de Juan 5, 4)

  • ¿Quién ha vencido al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios? (1º Carta de Juan 5, 5)

  • Si aceptamos el testimonio de los hombres, mucha más fuerza tiene el testimonio de Dios, y hay un testimonio de Dios, una declaración suya a favor de su Hijo. (1º Carta de Juan 5, 9)

  • Quien cree en el Hijo de Dios está guardando en sí la declaración de Dios. Quien no cree, hace a Dios mentiroso, ya que no cree al testimonio de Dios en favor de su Hijo. (1º Carta de Juan 5, 10)

  • Pues bien, este es el testimonio: que Dios nos ha dado la vida eterna, y que dicha vida está en su Hijo. (1º Carta de Juan 5, 11)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina