Löydetty 37 Tulokset: encontraban

  • Fortificó las ciudades de Judea, así como Betsur, en los límites de Judea, donde se encontraban las fuerzas enemigas, y puso en ellas una guarnición judía. (1 Macabeos 14, 33)

  • Aquel día no pidió nada, pero encontró una ocasión propicia para sus malos designios al ser llamado al consejo de Demetrio. Cuando le preguntaron en qué disposiciones y ánimo se encontraban los judíos, (2 Macabeos 14, 5)

  • según las prescripciones de la ley, y se la entregué a Baruc, hijo de Nerías, hijo de Masías, en presencia de mi primo Hanamel, de los testigos que habían firmado la escritura de compra, y de todos los judíos que se encontraban en el patio de la guardia. (Jeremías 32, 12)

  • Al lado de ellas pasaba un corredor, esas salas tenían el mismo aspecto que las piezas que se encontraban al norte: la misma longitud, el mismo ancho, la misma puerta, la misma disposición, la misma entrada. (Ezequiel 42, 11)

  • y al extenderse abrasó a los caldeos que se encontraban alrededor del horno (Daniel 3, 48)

  • ¿qué les pasaba? Venían a un montón de veinte sacos de trigo, pero sólo quedaban diez. Venían a un tanque de cincuenta arrobas de vino y se encontraban sólo veinte. (Ageo 2, 16)

  • Los jefes de los sacerdotes y todo el Consejo Supremo buscaban algún testimonio que permitiera condenar a muerte a Jesús, pero no lo encontraban. (Evangelio según San Marcos 14, 55)

  • Algunos fariseos que se encontraban entre la gente dijeron a Jesús: «Maestro, reprende a tus discípulos.» (Evangelio según San Lucas 19, 39)

  • Los jefes de los sacerdotes y los maestros de la Ley no encontraban la manera de hacer desaparecer a Jesús, pues tenían miedo del pueblo. (Evangelio según San Lucas 22, 2)

  • Sobrevino el hambre por toda la tierra de Egipto y de Canaán, y la miseria fue tan enorme que nuestros padres no encontraban qué comer. (Hecho de los Apóstoles 7, 11)

  • Empezó a tener contactos en la sinagoga con judíos y con griegos que temían a Dios, hablando también con los que diariamente se encontraban en las plazas de la ciudad. (Hecho de los Apóstoles 17, 17)

  • Los romanos querían dejarme en libertad después de haberme interrogado, pues no encontraban en mí nada que mereciera la muerte. (Hecho de los Apóstoles 28, 18)


“Apóie-se, como faz Nossa Senhora, à cruz de Jesus e nunca lhe faltará conforto”. São Padre Pio de Pietrelcina