Löydetty 29 Tulokset: devora

  • Va avanzando un fuego delante de él, que alrededor devora a sus contrarios. (Salmos 97, 3)

  • El tonto que se cruza de brazos, devora su propia carne. (Eclesiastés (Qohelet) 4, 5)

  • El otro viento consume las montañas y quema el desierto; como si fuera fuego devora todo verdor. (Sirácides (Eclesiástico) 43, 21)

  • Pues su maldad arde como fuego, devora zarzas y espinas, y después quema la espesura del bosque, y todos ellos se disipan como se disipa el humo. (Isaías 9, 19)

  • ¡Miren cómo viene de lejos el Nombre de Yavé! Su ira es una llama, su presencia es aplastante. En sus labios se nota su furor y su lengua es como un fuego que devora. (Isaías 30, 27)

  • Serán todos como paja que devora el fuego, ninguno de ellos podrá salvarse de las llamas. -y no serán brasas para el pan, o brasero para calentarse. (Isaías 47, 14)

  • y, al salir, verán los cadáveres de los hombres que se rebelaron contra mí. El gusano que los devora no morirá, y el fuego que los quema no se apagará, y todos se sentirán horrorizados al verlos. (Isaías 66, 24)

  • El león, que devora las naciones, se ha levantado de su madriguera y se ha puesto en marcha, abandonando su morada, para dejar tu tierra como un desierto, tus ciudades destruidas y sin habitantes. (Jeremías 4, 7)

  • Los saqueadores han subido a todas las alturas peladas del desierto, pues Yavé tiene una espada que devora de un extremo al otro del país y nadie se salvará. (Jeremías 12, 12)

  • En el ardor de su cólera ha quebrado toda la fuerza de Israel, ha retirado la protección de su brazo frente al enemigo, ha prendido en Jacob como fuego llameante que devora por todas partes. (Lamentaciones 2, 3)

  • Profetiza, hijo de hombre, con respecto a los Amonitas en respuesta a sus insultos. Les dirás esta palabra de Yavé: Han sacado la espada para la masacre, la espada reluce y devora, lanza destellos. (Ezequiel 21, 33)

  • El segundo era una bestia semejante a un oso; iba levantada de un lado y tenía tres costillas entre los dientes. Se le decía: «Anda y devora mucha carne.» (Daniel 7, 5)


“Deus ama quem segue o caminho da virtude.” São Padre Pio de Pietrelcina