Löydetty 211 Tulokset: cuerpo

  • Sepan que ya he juzgado al culpable como si estuviese presente, pues estoy ausente en cuerpo pero presente en espíritu. (1º Carta a los Corintios 5, 3)

  • La comida es para el estómago y el estómago para la comida; tanto el uno como la otra son cosas que Dios destruirá. En cambio el cuerpo no es para el sexo, sino para el Señor, y el Señor es para el cuerpo. (1º Carta a los Corintios 6, 13)

  • Pues ustedes saben muy bien que el que se une a una prostituta se hace un solo cuerpo con ella. La Escritura dice: Los dos serán una sola carne. (1º Carta a los Corintios 6, 16)

  • Huyan de las relaciones sexuales prohibidas. Cualquier otro pecado que alguien cometa queda fuera de su cuerpo, pero el que tiene esas relaciones sexuales peca contra su propio cuerpo. (1º Carta a los Corintios 6, 18)

  • ¿No saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo que han recibido de Dios y que está en ustedes? Ya no se pertenecen a sí mismos. (1º Carta a los Corintios 6, 19)

  • La esposa no dispone de su cuerpo, sino el marido. Igualmente el marido no dispone de su cuerpo, sino la esposa. (1º Carta a los Corintios 7, 4)

  • De igual manera la mujer soltera y la joven sin casar se preocupan del servicio del Señor y de ser santas en su cuerpo y en su espíritu. Mientras que la casada se preocupa de las cosas del mundo y de agradar a su esposo. (1º Carta a los Corintios 7, 34)

  • Castigo mi cuerpo y lo tengo bajo control, no sea que después de predicar a otros yo me vea eliminado. (1º Carta a los Corintios 9, 27)

  • La copa de bendición que bendecimos, ¿no es comunión con la sangre de Cristo? Y el pan que partimos, ¿no es comunión con el cuerpo de Cristo? (1º Carta a los Corintios 10, 16)

  • Así, siendo muchos formamos un solo cuerpo, porque el pan es uno y todos participamos del mismo pan. (1º Carta a los Corintios 10, 17)

  • y, después de dar gracias, lo partió diciendo: «Esto es mi cuerpo, que es entregado por ustedes; hagan esto en memoria mía.» (1º Carta a los Corintios 11, 24)

  • Por tanto, el que come el pan o bebe la copa del Señor indignamente peca contra el cuerpo y la sangre del Señor. (1º Carta a los Corintios 11, 27)


“Se tanta atenção é dada aos bens desta Terra, quanto mais se deve dar aos do Céu? Faça, portanto, uma boa leitura espiritual, a santa meditação, o exame de consciência, e fará progresso na perfeição cristã e no amor de Jesus.” São Padre Pio de Pietrelcina