Löydetty 100 Tulokset: caballo blanco

  • Unos en carros, otros a caballo, pero nosotros sólo recurrimos al nombre del Señor, nuestro Dios. (Salmos 20, 8)

  • No sean como el caballo o como el burro faltos de inteligencia, cuyo ímpetu dominas con la rienda y el freno." (Salmos 32, 9)

  • No es verdad que un caballo sirva para triunfar, no salvará al jinete ni con todo su brío. (Salmos 33, 17)

  • Rocíame con agua, y quedaré limpio; lávame y quedaré más blanco que la nieve. (Salmos 51, 9)

  • Al oír tu amenaza, Dios de Jacob, carro y caballo quedaron petrificados. (Salmos 76, 7)

  • No le atraen los bríos del caballo, ni un hombre por sus músculos le agrada; (Salmos 147, 10)

  • Gorgias tomó consigo cinco mil hombres de a pie y mil de a caballo y se puso en marcha de noche (1 Macabeos 4, 1)

  • Vieron el campamento de los paganos que era poderoso, bien defendido, y rodeado de hombres a caballo, toda gente experta en la guerra. (1 Macabeos 4, 7)

  • De allí salieron veinte mil hombres de a pie y dos mil de a caballo en dirección a Berea. (1 Macabeos 9, 4)

  • El ejército salió de su campamento mientras ellos permanecieron en su lugar para enfrentarlo. Los hombres a caballo estaban divididos en dos alas. En primera línea avanzaban los más aguerridos, precedidos por hombres armados de arcos y de hondas, (1 Macabeos 9, 11)

  • Se les apareció un caballo con una riquísima montura y, sobre él, un terrible jinete; lanzándose con ímpetu levantó contra Heliodoro sus patas delanteras. El jinete parecía tener armadura de oro. (2 Macabeos 3, 25)

  • Partieron todos juntos, llenos de entusiasmo. Cuando estaban cerca de Jerusalén, apareció, poniéndose al frente de ellos, un jinete vestido de blanco, con armadura de oro. (2 Macabeos 11, 8)


O sábio elogia a mulher forte dizendo: os seu dedos manejaram o fuso. A roca é o alvo dos seus desejos. Fie, portanto, cada dia um pouco. Puxe fio a fio até a execução e, infalivelmente, você chegará ao fim. Mas não tenha pressa, pois senão você poderá misturar o fio com os nós e embaraçar tudo.” São Padre Pio de Pietrelcina