Löydetty 426 Tulokset: aun
Pero aún tenían la carne entre los dientes, y todavía no terminaban de masticarla, cuando la cólera de Yavé se encendió contra el pueblo. Yavé le asestó al pueblo un golpe tremendo. (Números 11, 33)
Aún no terminaba de hablar, cuando la tierra se abrió a sus pies. (Números 16, 31)
Balaam respondió a los servidores de Balac: "Aunque Balac me diera su casa llena de plata y de oro, no desobedecería la orden de Yavé, mi Dios, no importa que fuera para una cosa pequeña o grande. (Números 22, 18)
Sin embargo, alojen aquí esta noche, por favor, para que sepa lo que Yavé me quiere aún decir." (Números 22, 19)
¿Quién podrá calcular el polvo de Jacob y contar aunque sea una cuarta parte de Israel? ¡Que muera yo con la muerte de los justos y que mi fin sea como él de ellos!" (Números 23, 10)
Entonces Balac le dijo: "Ven pues conmigo a otro lugar. Desde allí verás al pueblo, aunque no todo, y tú me lo maldecirás". (Números 23, 13)
Aunque Balac me dé su casa llena de plata y de oro, no desobedeceré la orden de Yavé. Bien o mal, no haré nada por mi mismo, sino que diré lo que diga Yavé. (Números 24, 13)
Pero ni aun así creyeron a Yavé, nuestro Dios. (Deuteronomio 1, 32)
Pero aunque yo muera en este país y no pase el Jordán, ustedes lo pasarán y poseerán esa espléndida tierra. (Deuteronomio 4, 22)
Tampoco el mestizo será admitido en la asamblea de Yavé, ni aun en la décima generación. (Deuteronomio 23, 3)
El amonita y el moabita no se admitirán jamás en la asamblea de Yavé, ni aun después de la décima generación. (Deuteronomio 23, 4)
«Mi padre era un arameo errante, que bajó a Egipto y fue a refugiarse allí, siendo pocos aún; pero en ese país se hizo una nación grande y poderosa. Los egipcios nos maltrataron, nos oprimieron y nos impusieron dura servidumbre. (Deuteronomio 26, 6)
