Löydetty 101 Tulokset: Oídos

  • No hay nadie como tú ni hay Dios fuera de ti, como lo hemos aprendido con nuestros propios oídos. (2 Samuel 7, 22)

  • Todavía estaban en camino, cuando llegó a oídos de David el rumor de que Absalón había dado muerte a todos los hijos del rey, sin que escapara ninguno. (2 Samuel 13, 30)

  • En mi angustia clamé a Yavé, invoqué a mi Dios, desde su templo oyó mi voz, y mi clamor llegó a sus oídos. (2 Samuel 22, 7)

  • Hijos de extranjeros me vienen a alabar, son todo oídos y me obedecen. (2 Samuel 22, 45)

  • Estas noticias llegaron a oídos de Joab, quien había seguido también el partido de Adonías, aunque no el de Absalón. Se refugió Joab en la Tienda de Yavé y se agarró a los cuernos del altar. (1 Reyes 2, 28)

  • Por eso, voy a traer sobre Jerusalén y sobre Judá un mal tan grande que a quienes lo escuchen les zumbarán los oídos. (2 Reyes 21, 12)

  • ¡Oh Yavé! Nadie hay como tú, ni hay Dios fuera de ti, según todo lo que hemos oído con nuestros oídos. (1 Crónicas 17, 20)

  • Ahora, pues, a los ojos de todo el pueblo de Israel, que es la asamblea de Yavé, y a oídos de nuestro Dios, guarden y mediten todos los mandamientos de Yavé su Dios, para que puedan poseer esta tierra espléndida y la dejen como heredad a sus hijos después de ustedes para siempre. (1 Crónicas 28, 8)

  • Que tus ojos, Dios mío, estén abiertos, y tus oídos atentos a la oración que se haga en este lugar. (2 Crónicas 6, 40)

  • Mis ojos estarán abiertos y mis oídos atentos a la oración que se haga en este lugar; (2 Crónicas 7, 15)

  • Después de la muerte de Joyadá los jefes de Judá vinieron a postrarse delante del rey, y el rey les prestó oídos. (2 Crónicas 24, 17)

  • Yavé les mandó profetas que dieron testimonio contra ellos para que volvieran a él, pero no les prestaron oídos. (2 Crónicas 24, 19)


“A ingenuidade e’ uma virtude, mas apenas ate certo ponto; ela deve sempre ser acompanhada da prudência. A astúcia e a safadeza, por outro lado, são diabólicas e podem causar muito mal.” São Padre Pio de Pietrelcina