Löydetty 26 Tulokset: Limosna
El agua apaga las llamas de la hoguera; la limosna borra los pecados. (Sirácides (Eclesiástico) 3, 30)
No discutas con el desesperado, ni dejes que el necesitado suspire por tu limosna. (Sirácides (Eclesiástico) 4, 3)
Más bien ora con fuerza y no dejes de dar limosna. (Sirácides (Eclesiástico) 7, 10)
Guarda como objeto precioso la limosna que se hace, preserva las buenas obras de cada uno como a la niña de sus ojos. (Sirácides (Eclesiástico) 17, 22)
Sé sin embargo generoso con el prójimo, no lo dejes esperando tu limosna. (Sirácides (Eclesiástico) 29, 8)
Un acto generoso es una ofrenda de harina pura, la limosna es un sacrificio de alabanza. (Sirácides (Eclesiástico) 35, 2)
tu limosna quedará en secreto. Y tu Padre, que ve en lo secreto, te premiará. (Evangelio según San Mateo 6, 4)
El administrador se dijo: «¿Qué voy a hacer ahora que mi patrón me despide de mi empleo? Para trabajar la tierra no tengo fuerzas, y pedir limosna me da vergüenza. (Evangelio según San Lucas 16, 3)
Ya cerca de Jericó, había un ciego sentado al borde del camino pidiendo limosna. (Evangelio según San Lucas 18, 35)
Sus vecinos y los que lo habían visto pidiendo limosna, decían: «¿No es éste el que se sentaba aquí y pedía limosna?» (Evangelio según San Juan 9, 8)
acababan de dejar allí a un tullido de nacimiento. Todos los días lo colocaban junto a la Puerta Hermosa, que es una de las puertas del Templo, para que pidiera limosna a los que entraban en el recinto. (Hecho de los Apóstoles 3, 2)
Cuando Pedro y Juan estaban para entrar en el Templo, el hombre les pidió una limosna. (Hecho de los Apóstoles 3, 3)
