Löydetty 19 Tulokset: Lázaro
Había también un pobre, llamado Lázaro, todo cubierto de llagas, que estaba tendido a la puerta del rico. (Evangelio según San Lucas 16, 20)
Estando en el infierno, en medio de los tormentos, el rico levantó los ojos y vio a lo lejos a Abraham y a Lázaro con él en su regazo. (Evangelio según San Lucas 16, 23)
Entonces gritó: «Padre Abraham, ten piedad de mí, y manda a Lázaro que moje en agua la punta de su dedo y me refresque la lengua, porque me atormentan estas llamas.» (Evangelio según San Lucas 16, 24)
Abraham le respondió: «Hijo, recuerda que tú recibiste tus bienes durante la vida, mientras que Lázaro recibió males. Ahora él encuentra aquí consuelo y tú, en cambio, tormentos. (Evangelio según San Lucas 16, 25)
El otro replicó: «Entonces te ruego, padre Abraham, que envíes a Lázaro a la casa de mi padre, (Evangelio según San Lucas 16, 27)
Había un hombre enfermo llamado Lázaro, que era de Betania, el pueblo de María y de su hermana Marta. (Evangelio según San Juan 11, 1)
Esta María era la misma que ungió al Señor con perfume y le secó los pies con sus cabellos. Su hermano Lázaro era el enfermo. (Evangelio según San Juan 11, 2)
Jesús quería mucho a Marta, a su hermana y a Lázaro. (Evangelio según San Juan 11, 5)
Sin embargo, cuando se enteró de que Lázaro estaba enfermo, permaneció aún dos días más en el lugar donde se encontraba. (Evangelio según San Juan 11, 6)
Después les dijo: «Nuestro amigo Lázaro se ha dormido y voy a despertarlo.» (Evangelio según San Juan 11, 11)
En realidad Jesús quería decirles que Lázaro estaba muerto, pero los discípulos entendieron que se trataba del sueño natural. (Evangelio según San Juan 11, 13)
Entonces Jesús les dijo claramente: «Lázaro ha muerto, (Evangelio según San Juan 11, 14)