47. Todo Israel, en tiempo de Zorobabel y de Nehemías, daba a los cantores y a los porteros lo necesario para cada día. A los levitas se les entregaban las cosas sagradas, y éstos cedían a los hijos de Aarón lo que les correspondía.





“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina