3. Después tomarás una sartén de fierro que pondrás cual muralla de fierro entre ti y la ciudad, y te quedarás vigilándolas; tu le pondrás sitio y quedará sitiada. Esta será una señal para la casa de Israel.





“Ele e ouvir a Sua voz por meio das Suas inspirações e iluminações interiores.” São Padre Pio de Pietrelcina