19. Cuando mires al cielo y veas el sol, la luna, las estrellas y todos los astros del firmamento, no te dejes arrastrar a adorarlos como dioses y a servirlos, pues Yavé, tu Dios, dejó que fueran la parte de los demás pueblos,





“Pense na felicidade que está reservada para nós no Paraíso”. São Padre Pio de Pietrelcina