6. El hombre de Dios le preguntó: «¿Dónde ha caído?» Y le mostraron el lugar. Entonces, Eliseo cortó un palo, lo arrojó allí y el hierro salió a flote.





O Pai celeste está sempre disposto a contentá-lo em tudo o que for para o seu bem”. São Padre Pio de Pietrelcina