7. Fue dirigida la palabra de Yahveh por boca del profeta Jehú, hijo de Jananí, contra Basá y contra su casa por todo el mal que hizo a los ojos de Yahveh, irritándole con sus obras, hasta hacerse semejante a la casa de Jeroboam, y también por haber exterminado a ésta.





“Subamos sem nos cansarmos, sob a celeste vista do Salvador. Distanciemo-nos das afeições terrenas. Despojemo-nos do homem velho e vistamo-nos do homem novo. Aspiremos à felicidade que nos está reservada.” São Padre Pio de Pietrelcina