Eclesiástico, 26
9. La lujuria de la mujer se ve en la procacidad de sus ojos, en sus párpados se reconoce.
9. La lujuria de la mujer se ve en la procacidad de sus ojos, en sus párpados se reconoce.
“O temor e a confiança devem dar as mãos e proceder como irmãos. Se nos damos conta de que temos muito temor devemos recorrer à confiança. Se confiamos excessivamente devemos ter um pouco de temor”. São Padre Pio de Pietrelcina