7. Pero cuando llegaron al centro de la ciudad, Ismael, hijo de Natanías, y los hombres que lo acompañaban, los degollaron y los arrojaron dentro de la cisterna.





“O temor e a confiança devem dar as mãos e proceder como irmãos. Se nos damos conta de que temos muito temor devemos recorrer à confiança. Se confiamos excessivamente devemos ter um pouco de temor”. São Padre Pio de Pietrelcina